Visita ilustre en el primer entrenamiento de la semana de la UD Las Palmas. Jonathan Viera, que se encuentra en Gran Canaria porque se lesionó el miércoles pasado durante un partido con su equipo, el Beijing Guoan chino, apareció por Barranco Seco alrededor de las 11.30 horas, justo al término de la sesión, para conocer las nuevas instalaciones y saludar a algunos de sus viejos compañeros.

El de La Feria se dejó ver en el campo David García Santana en su coche y acompañado de un amigo. En la mano izquierda portaba una bolsa del Hospital Perpetuo Socorro con una bolsa que contenía las radiografía que confirmaba una fractura en una costilla -un rival le golpeó con el codo de manera fortuita-, percance que le tendrá apartado de los terrenos de juego, según él, unos dos meses.

Nada más bajarse del vehículo, el grancanario se mostró sorprendido por la nueva cara de Barranco Seco. "Qué bien está esto, ¿no?", expresó. Y bromeó: "Algo de dinero que recibieron por mí habrán invertido por aquí". Luego, mientras se dirigía hacia la puerta de entrada al campo 1, donde los jugadores dejan sus botas, algunos acudieron a recibirle.

Sergio Araujo, Benito Ramírez, Mauricio Lemos, Deivid Rodríguez, los hermanos Castellano y Aythami Artiles y el propio Viera formaron un corrillo en el que hubo comentarios sobre las instalaciones renovadas o el periplo del mediapunta en China y, sobre todo, muchas risas. Posteriormente, todos entraron al edificio, donde se encontraba también el presidente Miguel Ángel Ramírez.