La maldición del nueve. Un asunto de estado. La UD Las Palmas tiene urticaria a los ejecutores. Rubén Castro Martín, uno de los emblemas del vestuario y referente del proyecto, sigue lesionado y corre peligro su presencia el próximo miércoles 7 de agosto en las filas amarillas para medirse al Real Betis en el Benito Villamarín. El artillero de 38 años fue examinado ayer en Sevilla y padece una tendinopatía isquiotibial. No se detalla el período de baja, tras la publicación de una nota en la web del club, pero no jugará esta tarde ante el Almería ni ante el Granada -el domingo en el Marbella Football Center-.

De esta manera, Rubén se habría perdido los primeros seis partidos de la pretemporada. Inédito y bajo un manto de interrogantes, tratar de forzar ante su exequipo, el Real Betis, donde se convirtió en el máximo realizador de su historia, parece una locura. Además, cabe reseñar que el argentino Sergio Araujo se pierde la primera jornada de la competición ante la SD Huesca por un esguince, que sufrió ante el Cádiz en La Línea. La entidad isleña no cuenta con el checo Tomas Pekhart, que se quedó en Barranco Seco, y solo quedaría Edu Espiau -que subió este verano del filial y está a la espera de recibir la ficha profesional- como única referencia ofensiva.

Ante el Tamaraceite, Mel recurrió a Boris, uno de los numerosos refuerzos de Las Palmas Atlético y logró una diana. Con diez goles en la fase inicial de preparación ante el Gran Tarajal y Tamaraceite, la UD encadena dos partidos sin marcar ante el Marítimo en el estadio Dos Barreiros de Funchal y Cádiz en La Línea. Hoy llega una nueva reválida ante el Almería en el estadio Municipal de Marbella. A dos semanas del inicio de la competición, Mel tiene un problema con el gol y en el reclutamiento de los francotiradores.