La gran reválida del telón de acero foráneo. El arte de defender, el arte de sobrevivir a las minas antipersona. Una muralla a prueba de artefactos,contratiempos y lesiones se presenta en La Romareda. La UD, tras encajar únicamente cuatro tantos en las primeras seis contiendas lejos del Gran Canaria (540 minutos de juego), asalta el domingo El Álamo maño -desde las 17.30 horas, GOL-. En la décima posición y a un punto del playoff de ascenso, el mérito oculto de la legión de Mel figura en su encomiable trabajo defensivo lejos de la Isla. De local, sin embargo, tras siete partidos, han recibido 15 goles. La cara más negra.
Pero lejos del partenón los guarimos son dignos de ´reseñar. El bloque del novelista recibe un tanto como visitante cada 135 minutos. En sus seis contiendas foráneas, el meta Josep Martínez fue batido en tres ocasiones desde el punto de penalti y solo en una en acción de jugada -Fali, del Cádiz y de cabeza, tras un córner-.
La UD firmó tablas en La Rosaleda ante el Málaga (1-1, gol de Adrián de penalti) y en el Heliodoro Rodríguez López (0-0) tapó todos los agujeros. Voló a Montilivi, en el estreno del internacional Jonathan Viera en este curso, y sucumbió de nuevo por una pena máxima (1-0, Stuani). En el doble desplazamiento consecutivo para medirse a la SD Ponferradina en El Toralín (0-2) y Lugo (0-2) en el Anxo Carro, se dejó el arco a cero. Ya en la última travesía, decepción ante el líder Cádiz de Cervera en el Carranza: 2-0. El citado remate de Fali y el penalti ejecutado por Álex bastaron para resolver un pulso marcado por la polémica del terremoto Aris Reig.
Seis partidos con el traje de visitante y cuatro tantos recibidos -tres de pena máxima- y el último tras un córner. Compromiso e intensidad. La furia de la legión del hidroavión. El mérito radica en el imponente grado de acierto a pesar del torrente de ausencias en estas primeras trece jornadas de Liga. Mel jamás ha dispuesto de todos sus efectivos tras dos meses de competición frenética.
Para medirse al Zaragoza, dos notables ausencias en la retaguardia como Álvaro Lemos y Martín Mantovani. Dos titulares que estarán un mes de baja y ponen en serio riesgo la escalofriante racha del telón de acero. Eric Curbelo y Mauricio Lemos, respectivamente, se perfilan como relevos. Ya ante el Fuenlabrada, en la última jornada, tuvieron que saltar al verde por el síndrome de la enfermería.
Líderes de plata
Benito Ramírez hizo mención al éxito defensivo de la UD. Es producto de la "intensidad" de un grupo humano que va primero en el ranking de plata con 50 tarjetas amarillas. El conjunto más tarjeteado figura en el punto de mira del estamento arbitral. Campeones en amonestaciones. El guarismo de cuatro tantos encajados en seis partidos también pone a los grancanarios en el primera plaza de la sobriedad. El segundo con menos tantos recibidos de visitante en este campeonato es el Sporting de Gijón (5). Seguido por el Lugo (6), Fuenlabrada (7), Elche (7), Málaga (7) y Alcorcón (7).
Por su parte, el Dépor es el más batido lejos de Riazor (14). Oviedo (12), Mirandés (12), Girona (11) y Extremadura (10) acompañan a los gallegos en la parte baja del hermetismo. Defensas frágiles con la etiqueta de visitante.
El dato de los cuatro goles recibidos en 540 minutos foráneos es el mejor de este siglo en este punto kilométrico de la competición -13ª jornada-. La UD nunca había mostrado esta contundencia en al zaga. Como muestra, el dato del pasado curso en el tramo final del ciclo costalero: ocho tantos.
En la temporada del ascenso (2014-15), tras los primeros seis partidos lejos del Gran Canaria, el conjunto de Paco Herrera había recibido siete tantos. Ninguna cosecha se acerca al registro de Mel. En el curso del Cordobazo (7) el mismo guarismo por los catorce de la 2012-13. En la 1999-00, la temporada del ascenso con Sergio Kresic como campeón de Segunda, la UD recibió seis tantos en este ciclo de seis duelos foráneos. Los amarillos subieron como el bloque menos batido de Liga.
Con la misiva de hacer olvidar las bajas de Raúl Fernández, Rubén, Sergio Araujo, Drolé, Pedri, Mantovani o Álvaro Lemos, Mel se aferra al telón de acero. Mirandés y Cádiz incendiaron La Romareda en esta 2019-20. Marcan el camino a seguir de una UD que se ha medido en 70 ocasiones al bloque maño. Tras 35 visitas al fortín de La Pilarica solo figuran ocho victorias isleños. Tres en este siglo (2003, 2014 y 2015) que valen de vitamina para la hazaña.
