Cristian López es el elegido para hacerle sombra a Rubén Castro. La competencia en la delantera insular era nula tras la salida de Tomas Pekhart de las dependencias insulares y la única alternativa al Moña como ariete hasta ayer era Juan Narváez, al que Pepe Mel prefiere situarlo por la banda izquierda para que aproveche sus diagonales y velocidad desde el costado. Ahora, con la llegada del punta ilicitano, el entrenador amarillo dispone de una alternativa más para desactivar el problema de escasez de gol que le asola desde diciembre.

López aterriza hoy en el Aeropuerto de Gando a las 8.50 horas, procedente de Alicante, donde se encontraba en el hogar familiar tras haber rescindido su contrato con el Hatta Club de la liga del golfo árabe. Esta condición es justo la que le ha permitido a la UD firmar un contrato por lo que resta de temporada con una opción de ampliación por otro curso más. Las salidas a última hora de Sergio Araujo y Pekhart en el mercado invernal dejaron al club con un total de 23 fichas profesionales. Por lo tanto, el delantero podrá elegir entre el dorsal 10 o el 17, según se le antoje.

A las 12.00 horas de mañana está previsto que el delantero alicantino pronuncie sus primeras palabras como jugador insular después de que pase el reconocimiento médico pertinente en las dependencias del Hospital Perpetuo Socorro, cuando el secretario deportivo, Toni Otero lo presente ante la sociedad insular.

Dos meses parado

Se desconoce el estado de forma en el que llega López a ponerse en manos de Pepe Mel, pues el último encuentro oficial que disputó el goleador fue el 2 de enero, cuando la afición del Hatta pudo celebrar el definitivo tanto de su delantero de los cinco que marcó con la camiseta de su último club en los doce partidos que disputó en la liga de los petrodólares.

Un periodo de 58 días sin oler a césped que precisamente fue la excusa que puso Mel para descartar la incorporación de Alessandro Matri a principios de febrero. "Le conozco bien desde que estaba en el Cagliari, el problema es que tiene 35 años y está en el paro", trasladó el técnico sobre la posibilidad de contratar a la vieja estrella del Milan, Juventus o Lazio entre otras grandes escuadras de la serie A italiana.

"Traer a un futbolista del que no estoy de acuerdo es absurdo, porque no lo voy a poner. Por eso debe venir alguien que nos mejore, porque de lo contrario seguiré mirando a los jóvenes", incidió Mel al respecto del alta de Matri, por lo que se sobreentiende que de sus palabras en febrero, deberá haber dado el visto bueno de Cristian López a pesar del tiempo parado y sobre su presencia en el radar futbolístico.

Porque el cartel del nuevo delantero amarillo es el de un jugador trotamundos. La hoja de ruta de Cristian López acumula doce escudos defendidos. Doce elásticas tan variopintas como las del Cluj, con el que ganó la Copa de Rumanía en 2016 -51 partidos, 18 goles-; el Angers -20 partidos, 2 goles- y el Lens -71 partidos, 33 goles- en la liga francesa, o las de su periplo por Inglaterra para jugar tres partidos con el Northampton Town -que actualmente está en la cuarta división inglesa-, cuatro con el Huddersfield Town y cinco con el Shrewsbury Town -tercera- en el que dejó un tanto.

Pero no solo por el extranjero se ha desempeñado López. El punta jugó 8 partidos con su Alicante, el que le permitió debutar en Segunda en la temporada 2007-08.

Asimismo, en las diferentes categorías del fútbol profesional en España ha pertenecido al Mestalla, filial del Valencia, con el que jugó 31 partidos y transformó 11 goles. Club al que llegó después de dos años con el Real Madrid Castilla en el que era una promesa de 20 años que compartió vestuario junto a jugadores consagrados hoy como Marcos Alonso, Pablo Sarabia o Nacho Fernández. En la Fábrica jugó 44 partidos y celebró 10 goles.

También López ha coincidido con jugadores tan ilustres como Roque Mesa, cuando ambos jugaron para el Atlético Baleares en la 2012-13, en Segunda B. Aquella temporada, el nuevo delantero de la UD hizo dupla en la punta de ataque con Walter Pandiani y, curiosamente, con el hijo de este, ambos en el club.

Después de abandonar el equipo pitiuso, el killer alicantino tuvo su última experiencia en un equipo español, con el Burgos. En El Plantío disputó 36 partidos en la categoría de bronce y perforó las redes 13 veces y vio la única tarjeta roja de su trayectoria.

El cuentakilómetros de Cristian López está pasado de vueltas, pero llega a la UD con la intención de demostrar la valía de un delantero con 84 goles en sus botas.