El lado más irónico del novelista. José Mel Pérez, en los micrófonos de Onda Cero, lució su vertiente más crítica y también cómica en relación al inicio del trabajo físico."Tengo ganas de estar en la fase de Spielberg, en la tercera. Entre más me lo explican, pues menos entiendo. No sé si estoy en la Fase 0, en la Fase 2...Lo importante es que salí un poco de casa [el pasado sábado 2 de mayo], fui al antiguo Estadio Insular sobre las 7.00 horas. Pensé que sería el único, el más listo. Me quedé asombrado, parecía la Gran Vía en Navidad de toda la gente que había", relata.

En relación a la nueva mecánica laboral en el fútbol -la imposición del trabajo individual desde la primera semana que comienza mañana lunes 4 de mayo-, aseguró que lo más le inquieta es "tener que explicar a mis defensas que la distancia de seguridad no existe en las faltas o córners en nuestra área". ¿Y qué debe hacer en Barranco Seco? Vigilar a los futbolistas en el primer apartado. "Me llevaré el desayuno, el almuerzo, la cena...Debo estar 24 horas. Me voy a parecer a un juez de silla en el tenis, que se pasan una eternidad vigilando".

Lamenta que los entrenadores de Primera y Segunda no hayan sido cuestionados. "Han consultado a la AFE, LaLiga, a los doctores, RFEF, entrenadores...Parece que los técnicos no valemos para nada". Se repartirá sus obligaciones con su segundo, Roberto Ríos, así como con Momo, técnico asistente, y David Gómez, preparador físico del club isleño.

Mel envía el plan a sus jugadores por la noche. "Al día siguiente van y ya saben lo que deben hacer". Receta ir "entreno a entreno, como diría el Cholo". En relación al final de la pandemia, determina "no sé qué decirle. Hasta hace dos meses, esto era una novela de ciencia ficción (...) Pero ya es una película de los hermanos Marx, ya te crees cualquier cosa. Solo falta que te digan que Godzilla viene por el mar de las islas". Pide que "no existan positivos" y una pretemporada "seria". "Jugaremos domingo-miércoles. No podemos engañar al espectador. No querrán ver un torneo de solteros contra casados".

Sobre el 'stage' en un hotel, "estaremos separados, no podemos reunirnos. Psicológicamente es nuevo y hay que estar preparados". Si no se puede jugar, "ahí están los 'sénecas' para atreverse a hacerlo [sobre la medida de Francia]. Siempre habrá ofendidos; no descendería a nadie. Si ascendería a la gente que esté en las primeras plazas". Recuerda que "con más equipos, habrá menos dinero para repartir de la televisión".