Equipos de protección individual (EPI), test PCR y de anticuerpos, probetas de laboratorio y una ciudad deportiva fortificada contra el virus. El mundo de las pistolas de temperatura y mascarillas ya han dejado de ser de ciencia ficción en el fútbol nacional. Nuevos tiempos. La UD Las Palmas comenzó esta mañana los reconocimientos médicos y los test de la Covid-19, que exige el Protocolo Básico de Actuación para la vuelta a los entrenamientos del Consejo Superior de Deportes (CSD). El técnico José Mel Pérez y los capitanes, Aythami Artiles o Alberto de la Bella, fueron las más madrugadores en este aterrizaje futurista en Barranco Seco.

El atacante del barrio pesquero de San Cristóbal, Tanausú Domínguez Placeres, también tuvo que afrontar la revisión clínica en el primer tramo de futbolistas. Desde las 9.00 horas, empleados, directivos, técnicos y jugadores han ido llegando a la instalación capitalina, que se ha convertido en una fortificación de geles y mascarillas. El viernes, desde las 16.00 horas, comienzan los entrenamientos de forma individual. La próxima semana, será el turno de la concentración en un hotel de la capital grancanaria.