Se ha escrito mucho del puente aéreo y sentimental entre el Manzanares -ahora el Wanda- y Las Canteras. Un viaje de ida y vuelta entre las ruinas del Vicente Calderón -ahora la joya del Metropolitano, costó 310.000 millones y es la nueva fábrica de furia- y el Estadio Gran Canaria que invita a una cátedra.

La lista es infinita. En el último siglo, la conexión del Estadio Insular -cerrado en 2003- con la capital de España baila de Alfonso Silva a Óscar Clemente -que solo jugó un partido oficial con el primer equipo ante el Eibar y con derrota-. Un Delorean indestructible. Jorge Larena, Juan Carlos Valerón, Juanito, Julio Durán, Adrián Pollo, Héctor Hernández, Sergio Marrero, Ramón, Sequeiros, Tevenet y el actual Víctor Machín 'Juan Carlos ValerónVitolo

Antes que se fundase el club amarillo, en 1930, Martín Cabral y Pepene -que llegaron del CD Marino-, dejaron su magia en el Atlético. Pepe Mesa, Ángel Arocha y Jesús Navarro ampliaron el patrimonio tropical en las filas colchoneras. Campos, Machín...Luego estalló el 'Atlético canario de los 40' y qué decir de la frase de Arencibia sobre la venta de Sergio Marrero al club colchonero. Aseveró que le había "endilgado a un drogadicto" al presidente Jesús Gil -pagaron unos 70 millones de pesetas para tres temporadas-.

El final de Sergio Marrero resultó terrorífico marcado por los excesos y la cárcel. Solo jugó cinco partidos con el Atlético -1988-89-. Ramón, Sequeiros y Tevenet valieron un ascenso con Kresic. Jorge Larena alivió las arcas tras el descenso con Vázquez (2002) y luego regresaría a la Isla tras pasar por el Celta de Vigo. Le toca a Clemente y se amplía un vínculo eterno.