Que Jonathan Viera volverá a jugar en la UD Las Palmas es algo que saben tanto el club como el futbolista, pero puede que suceda antes de que el de La Feria termine su contrato con el Beijing Guoan en diciembre de 2021. En concreto, esta misma temporada. Para que eso ocurra deben producirse una serie de factores, pero de momento la entidad amarilla guarda el dorsal 21 ante el posible regreso de su estrella. Ese número queda libre, no se toca.

Ya el propio presidente de la UD, Miguel Ángel Ramírez, abrió la posibilidad de que tan feliz acontecimiento para el equipo pudiera ocurrir antes de tiempo, aunque siempre desde el respeto a la entidad con la que tiene un vínculo hasta dentro de un año y tres meses.

"Si le rescindiesen y se quedase sin equipo, fichará por Las Palmas, pero con toda seguridad vendrá en diciembre de 2021, cuando termine su actual contrato", sentenció el máximo mandatario el pasado 22 de julio, cuando compareció en los canales oficiales para hacer balance del curso finalizado dos días antes.

Así pues, el tercer regreso de Viera depende de que rescinda su contrato con el Beijing o de que, como la vez anterior, el club chino acepte cederle, algo que parece menos factible porque en esta ocasión Viera no está lesionado, sino todo lo contrario: se encuentra en plena competición.

En el primero de los casos, la UD podría inscribirle en cualquier momento por tratarse de un jugador sin equipo; en el segundo, tendría que suceder antes del próximo 6 de octubre -el día 5 cierra el mercado de verano, o ya durante el mercado de invierno, que se abre el 4 de enero de 2021 y se cierra el 1 de febrero.

La cesión antes del cierre de la ventana de fichajes estival, por tanto, no parece una opción fácil, toda vez que el Beijing aspira a conquistar el campeonato chino, reanudado el pasado 26 de julio bajo un nuevo formato con dos grupos de ocho equipos. El de Viera, que juega hoy -a las 13.00 hora canaria-, marcha segundo a falta de seis partidos, y si quedara entre los cuatro primeros, algo que parece bastante factible, pelearía en los cruces por el título.

El grancanario es una de las piezas fundamentales para el técnico francés Bruno Genesio. Salvo en el primer encuentro, en los otros siete jugó como titular, y en los último cuatro los 90. Ha marcado un gol y ha dado dos asistencias, pero, más allá de los números, es el alma de equipo.

Si el Beijing mantiene la tendencia -17 puntos de 24 posibles-, jugaría el playoff a partir de la primera semana de octubre, justo cuando cierra el mercado. Además, al cuadro de la capital china le espera la Liga de Campeones asiática, con partidos los días 19, 22, 25, 28 y 31 de octubre, todos de la fase de grupos. Si avanzara en la competición, los octavos de final y el resto de cruces serían en noviembre, y si llegara a al final, la jugaría el 5 de diciembre.

Por tanto, tal y como deslizara Ramírez, la rescisión mediante un acuerdo entre el Beijing y el jugador parece la opción más viable para el regreso de la estrella. El jugador, por su parte, quiere volver a la Isla porque no está a gusto metido en la burbuja en la que se encuentran todos los equipos de la Superliga -la competición encerró a todos en dos hoteles de dos ciudades, por lo que los partidos se juegan en dos campos-, pero es consciente de que está supeditado a un contrato.

Esa situación está previsto que se prolongue en el tiempo y tal circunstancia podría facilitar que el jugador optara por llegar a un acuerdo para rescindir y volver a Gran Canaria con su familia. Al menos, se lo piensa. Por si acaso, la UD le guarda el '21' a la espera de acontecimientos.