La Provincia - Diario de Las Palmas

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Sergio Ruiz va con diésel

El cántabro, que se retiró en el duelo ante el Fuenlabrada por molestias físicas, se une al grupo tras tres días de descanso y salvo sorpresa será titular mañana ante el Girona

Sergio Ruiz conduce el balón ante la presión de Monchu, en el partido que enfrentó a la UD con el Girona en la primera vuelta liguera en el Estadio de Montilivi. | | LOF

El timonel de la UD en la presente temporada está hecho de otra pasta. Sergio Ruiz va con diesel en sus piernas y cuando todo apuntaba a que podía perderse el encuentro de mañana ante el Girona (20.00 horas, Movistar LaLiga) en el Gran Canaria, el santanderino, salvo sorpresa de última hora volverá a ser titular ante el conjunto catalán.

En el minuto 78 del último partido liguero que disputó la Unión Deportiva, frente al Fuenlabrada, Ruiz se retiró del césped del Fernando Torres dando su relevo a Javi Castellano. Las alarmas saltaron en la enfermería amarilla por los gestos del mediocentro cántabro y que Pepe Mel se encargó de matizar en la rueda de prensa postpartido en donde explicó que el de Astillero le había pedido el cambio “por unas molestias”.

Unos problemas físicos que provocaron que Sergio tuviera un plan específico para evaluar las dolencias que venía arrastrando desde semanas anteriores con unas ligerísimas molestias en uno de sus isquiotibiales.

La semana pasada se vio afectado por una ligerísima molestia en uno de sus isquiotibiales

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El domingo de la pasada semana, el día después de la disputa liguera frente al conjunto del sur de la comunidad de Madrid, guardara reposo; el lunes de esta semana hubo día libre para el equipo; y ya desde el martes el cántabro se volvió a vestir de corto de forma individual para ir avanzando en su progreso hasta que ayer formó parte de la sesión preparatoria junto al grupo, aunque se retiró antes de la conclusión del mismo por precaución y continuar con las pautas del trabajo específico que tiene que llevar a cabo el dorsal 3 amarillo.

Así pues, Mel vuelve a sonreir al disponer a una de sus piezas más fiables y favoritas con las que cuenta en la plantilla insular. Ruiz es una pieza fundamental en todos los sistemas que ha probado el técnico madrileño durante la temporada, ya sea de pivote único con dos interiores por delante de él, como mediocentro acompañado en una línea horizontal junto a Javi Castellano en la etapa más reciente del 4-4-2 del dibujo amarillo o incluso cuando se le ha permitido mayor libertad ofensiva en posiciones cercanas a la línea de delanteros gracias a que esta temporada ha destapado su tarro de las esencias con aroma a gol.

Ese perfil de jugador todocampista o denominado en el argot futbolístico con el término anglosajón box to box –en definitiva, un centrocampista con alta presencia en las dos áreas de juego–, le permite incluso estar en el Olimpo de los mediocentros más goleadores de LaLiga SmartBank.

Botas con pólvora

El santanderino ocupa el cuarto puesto entre los centrocampistas con más goles de la categoría, con 4 dianas –además de haber dado 3 asistencias–, solo adelantado por los 6 tantos que han firmado Salva Sevilla, del Mallorca; Andy Rodríguez, del Logroñés; y Óscar Sielva, de la Ponferradina.

Entre los registros anotadores de Ruiz precisamente se halla un gol al Girona en la primera vuelta la competición. Aquella noche del 9 de noviembre en Montilivi, el timonel de la UD recibió un pase a la altura del punto de penalti desde el costado derecho con la rúbrica de Rober en el que el cántabro solo tuvo que perfilar bien su cuerpo para rematar con su pierna diestra el cuero y batir a Juan Carlos para elevar el 1-0 en un duelo que finalmente Bernardo Espinosa se ocupó de firmar las tablas 1-1 tras un cabezazo en el área insular.

Aquel día en el feudo catalán, hace ahora cuatro meses, Sergio Ruiz compartió junto a Enzo Loiodice la responsabilidad de mover el balón por delante del encargado de la brújula que se le entregó a Fabio González, en una de las tantas variantes que ha probado Mel en su esquema en la sala de máquinas amarilla.

De los cuatro goles que ha anotado esta campaña, uno fue al Girona en la primera vuelta

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Una época en la que el rostro de la UD en el medio del campo estaba dibujado con las caras de Ruiz en los latifundios adelantados a la pareja de centrales y en los que el francés Loiodice, junto a Kirian Rodríguez eran los encargados de darle mimo al balón para distribuir la zona media hasta que llegó el día de Montilivi, cuando Fabio cogió el testigo del chicharrero Sergio adelantó su posición, hasta que cayó lesionado en Mirandés y estuvo cinco semanas KO –del 25 de noviembre hasta su regreso el 3 de enero ante el Espanyol, cuando Las Palmas vivió su última racha de tres triunfos consecutivos–.

Salvador del Racing

Entre las virtudes que posee Sergio Ruiz como futbolista se le puede atribuir una nueva como salvador económico de una institución futbolística en apuros. El Racing de Santander, club al que perteneció hasta el verano pasado, descendió a Segunda División B y el de Astillero fue vendido al Charlotte FC por un montante de 750.000 euros –franquicia que le tiene cedido en la UD hasta el 31 de diciembre–. Esta transacción, junto a la ayuda a los equipos que pierden la categoría de plata de 1,5 millones de euros ha salvado la temporada. Así lo confirmo ayer Víctor Alonso, director general del Racing de Santander, a Palco23.

El posible regreso de Enzo Loiodice, en tres semanas

El Expediente X que está viviendo Enzo Loiodice y la pubalgia que le mantiene alejado de los terrenos de juego desde diciembre del año pasado empieza a vislumbrar una fecha en el calendario en el que el francés pase página de su estancia en la enfermería amarilla y pueda volver a ponerse a disposición de Pepe Mel. En el calendario de la recuperación del interior galo se marcan tres semanas en las que las molestias en el pubis puedan remitir y se ponga a prueba una vez más desde que comenzara su particular calvario el 13 de diciembre cuando cayó lesionado frente al Alcorcón en el estadio de Siete Palmas. Cabe recordar que Loiodice se marchó a Francia durante la última semana de febrero para pasar una evaluación con los médicos de su confianza y considerar la opción de pasar por el quirófano. Una vez de regreso a la Isla y ponerse de nuevo en manos de los servicios médicos de la UD, se ha fijado el plazo de tres semanas en el que Enzo examine su estado físico y resuelva la incógnita de saber si podrá jugar en lo que resta de temporada. Todo dependerá de cómo se comporte la evolución del tratamiento que está llevando a cabo el centrocampista con pasado en el Dijon de la liga francesa. O vuelta a los terrenos de juego o quirófano. | D. R.


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