El jugador de banda al que se refería Miguel Ángel Ramírez cuando anunció ayer por la mañana que todavía quedaban cuatro jugadores por llegar a la UD Las Palmas es Óscar Francisco García Quintela, conocido futbolísticamente como Óscar Pinchi. Su llegada, aún no oficial, la anunciará la entidad amarilla en los próximos días, cuando el club isleño y la UD Extremadura, al que pertenece, aunque el curso pasado jugó cedido en el CF Fuenlabrada, den formalidad al acuerdo que ya tienen totalmente cerrado.
Será entonces cuando las partes den a conocer la modalidad en la que llegará el futbolista, de 25 años, y que terminaba contrato con el conjunto de Almendralejo en junio de 2023. Lo normal, si se tiene en cuenta que el Extremadura atraviesa un profunda crisis económica, con impagos incluidos, que pone incluso en peligro su participación el próximo curso en Primera RFEF, es que aterrice en la Isla a coste cero, tal y como hizo Ale Díez el verano pasado.
En cualquier caso, hay un nuevo extremo para la UD Las Palmas. Se trata del cuarto fichaje del cuadro amarillo de cara a la próxima temporada después de Erick Ferigra, Unai Veiga y Adalberto Peñaranda, el primero que puede jugar en ambas bandas del ataque, una posición que Pepe Mel considera clave en sus equipos.
El futbolista, además, no es un desconocido para el técnico madrileño, ya que fue él mismo el que le dio la oportunidad en el primer equipo del Deportivo de La Coruña tras subirlo desde el Fabril –filial deportivista– en la campaña 2017-18, un año antes de recalar en la UD.
Partidos y goles
Entienden tanto la dirección deportiva como el cuerpo técnico de Las Palmas que la nueva incorporación dará velocidad y atrevimiento al equipo en las alas, cualidades siempre tenidas en cuanta por un entrenador que apuesta casi siempre por la velocidad en las bandas, a pesar de que en muchos partido del curso pasado, ya avanzado el campeonato, optó por reforzar más el centro del campo.
Pinchi, de 25 años y nacido en La Coruña, jugó 27 partidos la campaña pasada con el Fuenla y marcó tres goles –y dos asistencias. En la anterior, con el Extremadura, logró cinco tantos –y cinco asistencias– en 38 choques. Su rapidez y verticalidad en ambos extremos fueron notarios, si bien destacó más en su estadía en Almendralejo que en Madrid.
Antes, en la temporada 2018-19, jugó en el filial del Atlético de Madrid, club al que llegó tras el descenso del Deportivo el año anterior. Su participación en Majadahonda también fue destacada: participó en 35 partidos y sumó 10 goles. Gracias a esos números tuvo la oportunidad de jugar en Segunda con el Extremadura, pero su descenso en la 2019-20 obligó al club azulgrana a desprenderse de él como de tantos otros futbolistas de cierto nivel.
La progresión que Pinchi llevaba tras su salida del conjunto del Francisco de la Hera se vio frenada la campaña pasada con sólo nueve titularidades en el Fuenlabrada, por lo que ahora, durante su estancia en la UD Las Palmas, pretende relanzar su carrera.
Su llegada se producirá días antes de que el equipo amarillo viaje a Marbella para realizar un stage de ocho días en los que se medirá con el Espanyol –miércoles 21–, el Sevilla –jueves 22–, el Wolverhampton –lunes 26– y el Cádiz –martes 27– antes de regresar a Gran Canaria el 28 de julio. Su puesta a punto de cara al inicio del campeonato, por tanto, será óptima a pesar de que se habrá sumado al trabajo junto a sus nuevos compañeros dos semanas después que el resto.
Óscar Pinchi, por sus cualidades y el conocimiento que el entrenador tiene de él, está llamado a ser uno de los extremos titulares de la UD. Competirá por un puesto en esa zona, de momento, con Pejiño, Aridai y Cedrés, toda vez que Benito ya cuenta como lateral izquierdo. En otras palabras, su misión será la de suplir de la mejor manera posible a Rober, que regresó al Real Betis después de su cesión.
Con la operación que se sellará próximamente, la UD cierra un círculo que abrió el verano pasado cuando el nombre de Pinchi fue propuesto por el secretario técnico Tino Luis Cabrera a la dirección deportiva. Un año después del jugador volvió a salir a la palestra y Las Palmas, esta vez sí, se lanzó a por él. Habrá adquirido en propiedad a un jugador con proyección que debe quitarse el sabor agridulce del último curso. Y que cuenta con el aval de Pepe Mel.
