La UD de Viera, pero sin Viera, aterriza en Montilivi con el brillo del golazo de Jesé Rodríguez ante el Real Valladolid como carta de presentación (18.30 horas, Movistar LaLiga-GOL). El flyer de la discoteca de los sueños. El aura del gran candidato a la gloria ante un nuevo triple salto mortal. Se busca techo a un proyecto de miras kilométricas que exhibe cintura táctica con la puesta de largo del plan de los tres centrales -Raúl Navas, Ferigra y Eric Curbelo-. Ante el conjunto catalán del terror Stuani y el mariscal Juanpe, ganar es una cuestión de privilegio. Con ‘JR-10’ de inicio, Cardona suple la ausencia de Benito Ramírez. En la medular baila un carrusel de novedades. No se casa con nadie el novelista Mel: Ruiz, Kirian y el diamante Moleiro quieren abortar desde la posesión al gigante de Míchel.
Ayer, el técnico madrileño de la UD ensayó con Óscar Pinchi como puñal por la derecha. Vendido Sylla, el Girona se aferra a Bustos como recambio natural. Un bloque con pánico al playoff y que se recrea con los amarillos de forma recurrente. La última victoria de la UD en el Montilivi data de 2014.
Pendientes de la resistencia negociadora del Beijing, y tras completar una grandísima segunda parte ante el Valladolid -que late imparable-, en el cementerio de Montilivi emerge una nueva UD. El reto de combinar de forma exitosa con dos registros tácticos viene bailando en la cabeza de Mel desde Marbella. Pues bien, llega el día. Ferigra y Navas maravillaron en las tareas de contención y destrucción con un señor partido. Ahora se reubica el tercer elemento: el comodín míster palmeras de chocolate Eric Curbelo. En los costados, Álvaro Lemos y Cardona.
Ruiz vuelve a liderar la sala de máquinas y Mel probó ayer con Óscar Pinchi de inicio en el ataque
El jugador de Lloret de Mar afronta el duelo de su vida. Se estrenó en Las Gaunas en una batalla carente de atributos. Pero este Girona -con zaga de cuatro- es una bestia. Juanpe, Bernardo, Gumbau, Terrats, Ureña, Aleix García y Bustos no son esclavos de la paz. Puede ser una carnicería y la UD busca el triple salto mortal. Maravillar con Jesé y retener a Stuani con la línea mágica de tres. Sorprende la ausencia de Nuke Mfulu, mientras que Rafa Mujica sigue aquejado de los efectos del virus.
Alza el telón bajo el rol de visitante la UD más camaleónica que se recuerde, con sacrificados ilustres como Pejiño -invisible ante el Valladolid- y un Maikel Mesa irreconocible. Pero aún queda mucho para sacar conclusiones. En la maratón de plata, la fe es clave. Tomar el infierno Montilivi, siete años después, será un wasap de fuego para el Bejing. Con esta UD no se juega. Dedicado a Viera, que se desespera en el Sur de la Isla, aguardando un tratado de paz para poder escenificar su tercer regreso. Y antes de diciembre, porque el tiempo juega en contra de un proyecto que enamora.
Jesé clama venganza. Su tanto fue sublime tras un soberbia combinación entre Kirian y Benito. Un Velázquez en tiempos de penuria. En el curso pasado, los catalanes perdieron siete partidos en su feudo. Una máquina de torturas.
Misterio Nuke Mfulu, dos listas y dos descartes
Omenuke Mfulu -que logró ascender con el Elche y ser pieza clave luego en la permanencia en la máxima categoría-, fichado el 3 de agosto para reforzar la medular isleña, encadena dos descartes con la UD. El misterio Pogba. Ante el Valladolid, se quedó fuera de la relación de convocados sin figurar en el parte de bajas. Ayer, José Mel Pérez volvió a prescindir de una de las adquisciones de lujo de la dirección deportiva para aportar músculo y casta a esa demarcación de mediocentro defensivo. En el pulso con Fabio o Enzo, que sí han citado convocados, el exjugador del Stade de Reims sigue perdiendo. De las siete adquisiciones, solo figuran sin estrenarse Veiga y Nuke. La llegada del timonero de la República Democrática del Congo parecía que cerraba la puerta a Fabio, que se aferra a su licencia profesional. Con la anunciada salida de Cedrés, el club amarillo sigue buscando un central. Coco fue citado por Mel, en otro claro guiño del novelista a la factoría. | P. C.
