La UD Las Palmas hizo una oferta a Ibai Gómez, pero el extremo, que rescindió su contrato con el Athletic Club de Bilbao el pasado mes de julio, la rechazó por considerarla demasiado baja a nivel económico. Ambas partes ven muy difícil un cambio de guion: nadie quiere dar su brazo a torcer.
Ibai Gómez tiene una oferta de la UD Las Palmas encima de la mesa, pero esta es demasiado baja para las pretensiones de un jugador que tiene otras muchas propuestas de Primera y Segunda División. Es, por tanto, un sueño demasiado caro para la entidad amarilla, que sólo podría hacerle un hueco si el extremo, que cumplirá 32 años en octubre, aceptara cobrar menos de lo que podría ganar en otros equipos.
Es una cuestión, sin embargo, que el propio entorno del jugador descartó ayer a última hora. Fuentes cercanas a Ibai confirmaron a este medio que las posturas estaban alejadas y que «mucho tendría que cambiar» la situación para que el bilbaíno acabara como amarillo.
El interés de la UD por hacerse con los servicios de Ibai Gómez, que rescindió su contrato con el Athletic Club de Bilbao el pasado mes de julio, por lo que es un agente libre, viene de lejos. Desde hace semanas la entidad le hizo una oferta que, por ahora, es inamovible, por lo que su posible llegada a Las Palmas no tiene visos de que ocurra.
Desde la propia entidad amarilla también confirmaron a este medio que la situación la llegada de Ibai era «difícil», aunque sin especificar el motivo, que no es otro que el salario del futbolista, al que le ofrecen más dinero en otros sitios. El Elche o el Rayo Vallecano son dos de los equipos que más se han interesado por él.
Los entornos del jugador y del club ven muy difícil la llegada del extremo porque ninguno piensa ceder
Cabe destacar que el vasco, que debutó en el fútbol profesional con el Athletic Club en la temporada 2010-11, se encuentra en Gran Canaria por motivos familiares, dado que su pareja es de la Isla, sin embargo, tal circunstancia no le acerca a la UD.
La única posibilidad, remota, de que Ibai pudiera recalar en la plantilla amarilla este verano, es que el club de Pío XII le ofrezca más dinero, para lo que tendría que liberar masa salarial mediante la salida de algún futbolista –de momento sólo hay una ficha libre, que sería para Cristian Cedrés si finalmente no se marcha cedido–, algo que sólo se produciría si alguno pide salir en busca de más minutos.
Pero ni la entidad ni el jugador están por la labor de dar su brazo a torcer y lo que ambas partes prevén es que el futbolista terminará en un equipo que le ofrezca mejores condiciones.
Las alas
La llegada de un extremo, por otra parte, es una cuestión que el club valora hasta el último día del mercado –el martes que viene–, toda vez que es una de las posiciones en las que menos efectivos hay. Pepe Mel cuenta de momento con Pejiño y Pinchi como futbolistas puros de esa demarcación, aunque también pueden jugar ahí Peñaranda, Jesé, Clemente o Benito. En cualquier caso, el técnico vería con buenos ojos la llegada de otro puñal para las alas.
Pero no tiene pinta de que sea Ibai, que agradece la propuesta de Las Palmas pero la descarta por una oferta económica que considera demasiado para su caché. Jugo en el Athletic Club entre 2010 y 2016 para luego fichar por el Alavés, con el que jugo dos cursos y medio, hasta enero de 2019. Entonces regresó a casa, donde permaneció hasta la campaña pasada –sólo participó en 13 partidos ligueros–.
A falta de cinco días para el cierre del mercado, el sueño de Ibai es demasiado caro para la UD. El club, pese a todo no descarta que haya más movimientos.
