De Luxemburgo a Gran Canaria. De la selección al equipo. Del frío al paraíso. Alberto Moleiro está de vuelta después de tres partidos y más de una semana de concentración con la selección española sub 19. Se suma hoy a los entrenamientos con la UD Las Palmas y está disponible para visitar al Málaga CF pasado mañana (17.15 horas, Movistar Vamos) en La Rosaleda. Su regreso es, para Pepe Mel, una bocanada de aire fresco entre tantas ausencias.
Porque la última participación del tinerfeño con la casaca amarilla fue portentosa, con una gran actuación en el Carlos Tartiere de Oviedo con asistencia de gol incluida a Kirian tras una buena jugada personal. Revolucionó el partido desde su entrada en el minuto 58 y llevó a su equipo al empate, tal y como había hecho semanas atrás con su irrupción en el choque ante el Ibiza, al que marcó su único gol del curso hasta ahora.
Por eso es previsible que salga desde el banquillo y no desde el inicio, pero, sobre todo, porque fue el modus operandi del técnico con el jugador en la convocatoria anterior fue así. Tras perderse el duelo de Anoeta ante la Real Sociedad B, fue suplente frente al Fuenlabrada y en Oviedo, aunque en ambos casos influyó la buena respuesta de Kirian a su titularidad en ausencia de fijos como el propio Moleiro, Jonathan Viera o Pejiño.
En cualquier caso, es un refuerzo más para el madrileño en su intento por que el equipo recupere la senda del triunfo en La Rosaleda tras la derrota del fin de semana pasado ante el Zaragoza.
La participación del centrocampista con el combinado de Santi Denia fue satisfactoria. Jugó la segunda parte del partido que España ganó a Luxemburgo (2-1) y fue titular en los dos encuentros siguientes, ante Azerbaiyán, al que marcó un gol (6-1) y Bélgica (2-2), contra el que se metió un tanto en propia meta.
Tras completar 10 días más de aprendizaje en el inicio de su carrera profesional como futbolista, Moleiro regresa al paraíso para competir por algo más que una clasificación para el Europeo sub 19 que prácticamente estaba sellada: el ascenso a Primera División, el objetivo que nadie oculta ya en la UD superado el primer tercio del campeonato.
Del centro del Europa a Canarias, de Denia a Mel, de la roja a la amarilla. Son algunos de los cambios que experimentará Moleiro en poco días. Está listo para Málaga, aunque de Mel depende que sea titular o no. En cualquier caso, la magia está de vuelta.
