La contienda de la necesidad. Dos escudos y tres puntos con aroma a salvavidas. La UD, un punto de doce -la peor secuencia del curso- y fortalecida moralmente tras eliminar al Vélez en la Copa del Rey, desafía mañana al Sporting de Gijón (19.30 horas, Movistar LaLiga y GOL) en el Gran Canaria. Si el cuadro de José Mel Pérez no ve la luz -28 días sin ganar-, lo del conjunto gijonés es una depresión gigantesca. La descomposición de un firme candidato al ascenso: 46 días sin ganar, dos puntos de 24 en litigio y un estratega David Gallego, cuestionado por el entorno. Se juega el puesto en el partenón.
El reloj amarillo se detuvo el 3 de noviembre ante el Fuenlabrada -última victoria-. Luego llegaron el empate ante el Oviedo en el Tartiere (1-1) y las derrotas ante el Real Zaragoza (2-3), Málaga (2-1) y Leganés (4-1). Especialmente ruinoso fue el último tanteador, ya que en Butarque se besó el bochorno. A pesar del bajonazo, el bloque del novelista defiende la sexta plaza. Solo entregó el alma en el infierno pepinero, en el resto de contiendas mereció un mayor botín.
Tras tumbar al ‘Fuenla’, con dos tantos de Jesé, el cuadro amarillo lucía la tercera posición. Tras ser zarandeada en Leganés, ha perdido tres posiciones. En relación a la depresión sportinguista, en la décima jornada, ocupan la primera plaza. Un líder ingobernable -seis victorias, tres empates y una sola derrota en ese tramo de diez contiendas-. Ahora marchan décimoterceros tras conceder 22 puntos en las últimas ocho contiendas.
La figura de David Gallego está bastante deteriorada por la crítica y recupera a Djurdjević tras superar el virus. Con cinco dianas, es la gran amenaza. Disputó su último partido con el Sporting el pasado 7 de noviembre en La Romareda.
Un Sporting a la deriva debe doblegar a la historia. La última victoria del conjunto asturiano en el recinto de Siete Palmas se remonta a 2004. De las últimas once visitas, solo ha sido capaz de arrancar tres empates (2007, 2014 y 2016).
El ‘Pedrazo’ y el gesto de Espiau
La visita del once gijonés evoca al (3-2) del último precedente -29 de noviembre del 2020-. Un recital de Kirian activó la remontada con los tantos de Rober y el último de Espiau. El delantero isleño festejó el definitivo 3-2 mandando a callar a la Tribuna. El recinto estaba clausurado por el Covid.El tinerfeño, por su parte, saltó al césped en el 46’ en un movimiento genial de Mel. A la desesperada, el novelista dio entrada a Kirian y a Enzo. Clau, Maikel y Espiau completaron la locura. Una gran noche que catapultó a Mel a la estratosfera.
En septiembre de 2019, Pedri se estrenó como realizador de amarillo en el Gran Canaria. Batió a Marino y fue inmortal como el ejecutor más precoz de la historia de la UD. Del diamante a la extrema urgencia. Mañana, ganar es la vida.