Crónica de la madre de todas la hazañas desde una butaca VIP. 161 páginas y una joya para coleccionistas. La liguilla de 42 días que despertó a una Isla de la pesadilla más cruenta. Goles para escapar de la UVI. Ya está en las librerías '1996. Memorias de una reconquista', la viagra del sentimiento amarillo. La mejor manera de escapar de la depresión. "Fue una orgía de felicidad y había que contarlo". El periodista Manuel Borrego, director de la publicación digital Tinta Amarilla y ex Jefe de Deportes de LA PROVINCIA / DLP, presentó esta mañana en la sala de prensa del Gran Canaria su obra literaria sobre el ascenso de los ascensos. Al precio de 20 euros y en las librerías Canaima, Yaya (Arucas) y la Tienda Oficial de la UD, figura una enciclopedia de testimonios, fotos, secretos, alineaciones, llantos y un dibujo de Manolo Padrón -página 95- como pergamino mágico. El Guernica de un vuelo que catapultó a la UD. Un Binter de las catacumbas del infierno del fútbol de barro hacia la alta alcurnia de Segunda.

El almuerzo del 25 aniversario del éxito, que se cumplió en el pasado año y contó con una celebración en La Marinera, sirvió a Manolo Borrego como pretexto para redactar este fundamento sociológico. ¿Cómo una hazaña deportiva se convierte en acontecimiento social? Hay que leerse las 161 páginas de la obra, publicada con el respaldo de la Fundación Canaria Destilerías Arehucas, para descubrir el Santo Grial. La UD superó los 90 tantos y derribó las cadenas de sus complejos. Con un Tenerife instalado en el glamour de Europa, Rosales patentó un estilo arrollador.

"Fueron tres años de frustraciones en aquella Segunda B, y te encuentras con datos y situaciones curiosas como disputar el último partido oficial de la UD en un campo de tierra y fue ante el Gáldar. Se cruzó con la Asociación de Vecinos Santa Ana, que parecía un clon de la UD. Hay aventuras, llantos, secretos...Y el retrato de Manolo Padrón que solicitó expresamente Rafa Méndez. En un solo folio, queda plasmada la magia de esa noche [un 22 de junio de 1996]. Es para enmarcarlo. No es un libro al uso; se fundamenta en trasladar el sentimiento y latido de los protagonistas. Las lágrimas de Juan Carlos Valerón, que se convirtió en un personaje estelar de la obra de forma silenciosa, casi sin querer. Es cierto que no jugó mucho, pero su calado y predisposición, me cautivaron. Edu García fue su maestro, lo que significó para Juan Carlos aquella temporada, bien merece bucear por esta obra. Aquella plantilla era el fiel reflejo de la felicidad", asevera el autor.

Borrego incide que los noventa "no son para olvidar [como espeta el polémico himno de la UD], son para recordar". "Lo que sí logró ese equipo fue unir Gran Canaria. Todo empezó en un derbi contra el Tenerife y aparecen 10.000 personas para presenciar un entrenamiento de Las Palmas. ¿Qué tuvo ese ascenso? Pues lo tuvo todo y un interrogante. ¿Qué hubiese pasado si el Consejo de Administración que llegó después de junio de 1996 no desarma aquel equipo? Apuntaba a Primera".

Rafa Méndez, consejero de la UD y presidente de la Fundación Canaria Destilerías Arehucas, Adrián Déniz, presidente de la entidad amarilla en aquel curso 1995-96, Pacuco Rosales, entrenador del plantel y que luego sería despedido en la 1996-97, y Manolo López, el capitán, estuvieron presentes en la puesta de largo de este disco duro de sueños y melancolía.