La UD Las Palmas guardó sus cartas para el derbi hasta última hora. Ni Pepe Mel, en su comparecencias dos días antes del partido, ni nadie, comunicó en ningún momento que los cinco futbolistas que habían dado positivo el lunes de la semana pasada en los test PCR obligados por la LaLiga tras el parón navideño estuvieran descartados para el choque ante el CD Tenerife. Porque en realidad no lo estaban, pese a la creencia global.
Los cinco nombres que la entidad amarilla publicó como contagiados por covid ese primer día fueron los de Maikel Mesa, Álvaro Valles, Clau Mendes, Enzo Loiodice y Nuke Mfulu. El secreto del club radicó en que estos dos últimos –también Maikel– ya habían dado positivo varios días antes, por lo que estaban a tiempo de llegar al derbi, toda vez que la cuarentena de siete días comienza desde la revelación del contagio.
Sin embargo, si transcurridos cinco días un jugador no tiene ningún síntoma de covid, ya puede incorporarse junto al resto del grupo en los entrenamientos. Fue lo que sucedió con Loiodice y Mfulu, según fuentes de la UD. Los otros, en cambio, no cumplieron con ese requisito y por eso causaron baja finalmente.
Cardona, por su parte, tampoco había empezado a entrenar el martes pasado junto a sus compañeros por haber sido contacto estrecho de Clau, pero como dio negativo y tampoco presentaba ninguna señal de estar contagiado, también se sumó al trabajo.
Cabe recordar que Adalberto Peñaranda, por su parte, dio positivo el jueves, por lo que de ninguna manera podía estar presente en el derbi del Heliodoro. En su caso, mañana podría haberse incorporado a los entrenamientos si no hubiera tenido síntomas, pero como es jornada de descanso, deberá esperar al miércoles, día en que también está previsto que se sumen Valles, Clau y Maikel.
Confianza
Ayer la UD Las Palmas no comunicó ningún positivo, por lo que en condiciones normales todos los jugadores tendrían que estar disponibles para recibir a la UD Almería el próximo domingo (20.30 horas) salvo los lesionados Lemos, Rafa Mujica y Pejiño, a la espera de Loiodice –tuvo que retirarse del Rodríguez López antes del descanso porque se le salió el hombro derecho dos veces, al igual que le sucediera contra la Ponferradina en la primera vuelta–.
En el seno de la entidad están convencidos de que la revelación de seis casos en total se debió sobre todo al parón por las vacaciones navideñas. Muchos de los miembros del plantel se marcharon de la Isla para estar con sus familiares y los que se quedaron también estuvieron en contacto directo con muchos de sus allegados por tratarse de unas fechas tan señaladas en el calendario.
Ahora, con la reanudación de la Liga, todos esperan que los positivos desaparezcan, ya que los jugadores estarán más controlados. Pero si aparece algún contagio, con no tener síntomas pasados cinco días basta para jugar.
