Hay nombres propios que explican la reacción de la UD Las Palmas en el último mes de competición. Desde Xavi García Pimienta como jefe del banquillo hasta Álvaro Valles como apuesta suya en la portería ante el bajo rendimiento de Raúl Fernández. Pero sobre todo el cuarteto del talento y los goles, aunque con cuotas distintas de protagonismo. En cualquier caso, entre Kirian, Jonathan Viera, Jesé y Sadiku han marcado 10 de los últimos 11 tantos del equipo y se presentan el domingo (15.15 horas) en Can Misses como la amenaza principal de la UD Ibiza en el partido del ataque total.
Porque está previsto que el conjunto de Paco Jémez juegue como siempre suele hacerlo, con el foco principal puesto hacia la portería contraria, misma filosofía que la UD. Luego, todo puede pasar e incluso el 0-0 está contemplado como uno de los posibles resultados finales, pero sobre el papel el choque será de ida y vuelta, o al menos así preparan el compromiso ambos entrenadores.
En los últimos seis choques, sólo Rober González marcó un gol sin ser ninguno de los cuatro killers. En esos partidos el cuadro amarillo sumó un total de 11 tantos. El primero fue frente al Girona, obra de Jesé, de penalti, antes de que el cuadro catalán remontara el partido (1-3) a partir de la expulsión de Rafa Mujica, tras la que el equipo, de manera incomprensible, se entregó a la derrota. Renunció a competir.
Ese duelo supuso una ola de críticas y pitos en el Estadio de Gran Canaria, que, como el propio club, dio por finalizada la temporada. Desde las altas esferas de la entidad comenzaron a deslizar que el objetivo del playoff sería a partir del curso que viene. Nadie creía en la salvación salvo el técnico, porque no le quedaba otra, y los jugadores.
Y esta llegó en Valladolid, punto de partida del despegue de la UD, situada hoy a sólo tres puntos de la promoción de ascenso cuando lo tenía a nueve hace seis jornadas. Aquel 20 de marzo en Zorrilla supuso, además, el descubrimiento de Armando Sadiku, hasta entonces relegado a la suplencia permanente, como goleador.
Los cuatro acumulan en total 27 de las 48 dianas que registra Las Palmas en 36 jornadas de Liga
Logró el 0-1 final al aprovechar una serie de rechaces y el partido siguiente, frente al Leganés en casa, logró otros dos, el primero para empatar tras una buena anticipación y el segundo para sentenciar tras empujar a la red otro balón perdido en el área (4-2).
Ese mismo día, Jonathan Viera y Kirian Rodríguez también vieron portería. Los dos interiores –con Mfulu por detrás– ya habían dado un paso al frente en su juego, pero ahora, además, marcaban goles, sobre todo el tinerfeño, protagonista de tres goles desde fuera del área consecutivos.
De alguna manera, el centrocampista había comenzado a cumplir la exigencia de García Pimienta: aportar más goles. Sólo tardó seis días en volver a hacer diana, en Ponferrada, aunque con la ayuda de un defensa, para lograr el empate que supuso el punto de partida para el éxtasis final con el tanto de Rober en la última acción del encuentro.
Kirian también fue decisivo la semana siguiente, pues marcó el único tanto del partido, el del triunfo en la cita ante el Amorebieta en Siete Palmas. Fue el mejor de su repertorio, con un control en la frontal y posterior golpeo directo a la escuadra.
El pasado Viernes Santo, Sadiku volvió a marcar después de dos jornadas sin hacerlo para igualar la contienda frente al Eibar en Ipurua y luego Jesé, el que había iniciado la serie con un penalti frente al Girona, logró el segundo, también con un pena máxima. Así pues, en las últimas seis jornadas, Sadiku ha conseguido cuatro goles, Kirian tres, Jesé dos, Jonathan Viera uno y Rober otro.
En total en todo el curso, el ‘10’ lidera la tabla con 10 tantos, Viera suma ocho, Kirian cinco y Sadiku cuatro –marcó dos en Copa del Rey–. El cuarteto mágico de la UD suma, por tanto, 27 goles, más de la mitad de los que ha marcado el equipo –48–. A su buen estado forma y a su punto de mira se aferra Las Palmas en el partido del ataque total frente al Ibiza.
