Sandro progresa y apunta a volver en dos semanas, ante el Villarreal B

El delantero, lesionado en el choque de Teruel, quiere regresar en el último duelo del año y de la primera vuelta | Valles y Viera, para enero

Sandro Ramírez corre perseguido por los defensores del Teruel, Edu Cabetas (con brazalete) y Redolar

Sandro Ramírez corre perseguido por los defensores del Teruel, Edu Cabetas (con brazalete) y Redolar / LOF

P. F.

Si bien la plantilla de la UD Las Palmas se encuentra en Asturias desde el jueves por la noche con motivo del doble compromiso ante el Sporting de Gijón (0-1) y el Real Oviedo (mañana, 18.00 horas), hay quien trabaja en Las Palmas de Gran Canaria. Son los casos de Sandro Ramírez, Álvaro Valles y Jonathan Viera, los tres lesionados del plantel que se ejercitan con los recuperadores del club con el objetivo de estar de vuelta lo antes posible.

El que más cerca está de volver a los terrenos de juego es Sandro Ramírez, que se rompió el bíceps femoral izquierdo en la cita de la primera eliminatoria de la Copa del Rey, en Teruel, y se ha perdido ya los tres últimos compromisos ligueros. Aunque en un primer momento el periodo de baja se estableció en tres semanas, el jugador presentaba una rotura más grande que la anterior, lo que elevaba el plazo a un mes o cinco semanas.

Finalmente, toda vez que el grancanario ha evolucionado favorablemente en su recuperación, prevé estar de vuelta en la última cita del año y de la primera, prevista para el sábado 17 de diciembre en Villarreal frente al filial del submarino. Para que eso sea posible el delantero tendría que sumarse al grupo a lo largo de esta semana, cuando la expedición regrese a Gran Canaria para preparar el encuentro del domingo contra el Albacete, algo que está previsto que suceda.

Sandro, llegado a la UD cedido por el Huesca el pasado verano a cambio de 500.000 euros –la UD se comprometió con el jugador a pagar otros 350.000 a final de curso para tenerlo en propiedad, cantidad que ascendería a un millón si el equipo logra el ascenso–, no ha tenido la continuidad que deseaba por culpa de las lesiones. Nada más llegar, con el campeonato ya empezado, se rompió por sus ansias de debutar, cosa que no hizo hasta la séptima jornada, frente al Granada.

Luego, en Miranda de Ebro, marcó su único gol como amarillo hasta el momento al aprovechar un gran pase de Jonathan Viera, sin embargo, tuvo que pedir el cambio porque se sintió sobrecargado. Prefirió prevenir a curar. El isleño, que no pudo participar en Huesca por la cláusula del miedo –Las Palmas prefirió no pagar alrededor de 200.000 euros–, sólo ha sido titular en cuatro partidos ligueros. En el de Copa, en el que fue suplente, se rompió –el 13 de noviembre–.

Mejor esperar

Los casos de Valles y de Jonathan Viera son diferentes, ya que la vuelta de los dos está prevista para el primer partido de enero y de la segunda vuelta, ante el Racing el fin de semana del 7 y 8 de enero –días antes, la UD jugaría un partido de Copa si elimina a La Nucía el próximo 22 de diciembre–. El portero, operado del menisco hace varias semanas, ya se ejercita, pero nadie quiere tener prisa; el capitán, con un rotura en el sóleo, zona delicada, aprovechará el parón para ponerse a tope.

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