La UD, a la espera de la explosión de los ‘nueves’

A falta de un sólo partido para el cierre de la primera vuelta, que en el caso de la UD Las Palmas terminará pasado mañana (17.30 horas) con su partido frente al Villarreal B en el Mini –campo principal de la Ciudad Deportiva José Manuel Llaneza–, los delanteros del cuadro amarillo no han terminado de explotar, sobre todo a nivel goleador. El motivo fundamental no ha sido el bajo rendimiento, sino más bien las lesiones que han sufrido los tres a lo largo de las 20 primeras jornadas. Sandro y Andone apenas han podido participar, y Marc Cardona se rompió cuando mejor estaba. De alguna manera, todos esperan que sirvan como refuerzos de cara al tramo decisivo del curso.

El último en caer fue el atacante grancanario, el pasado 13 de noviembre en el choque de la primera eliminatoria de la Copa del Rey en Teruel. Entró justo tras el descanso y duró poco en el terreno de juego: una microrrotura en el isquiotibial izquierdo en una arrancada iba a tenerle alrededor de un mes fuera. El jugador cedido por el Huesca ha trabajado ha destajo en las últimas semanas para adelantar su vuelta y ya trabaja con el grupo, aunque su presencia en la convocatoria para los partidos ante el filial del Submarino y La Nucía no está garantizada. Quizá sea más prudente esperar a enero. En cualquier caso, será una decisión de última hora.

García Pimienta sólo ha podido contar con los tres al mismo tiempo en el choque ante el Cartagena

De estar disponible sería la segunda vez que coincidirían los tres en una citación. La primera fue en el encuentro frente al Cartagena en el Gran Canaria (1-0) y el que no jugó fue Marc Cardona, que venía de una lesión y vio los 90 minutos desde el banquillo. En el resto de jornadas, Xavi García Pimienta no ha tenido la posibilidad de elegir entre el triplete de teóricos killers en la plantilla.

Reparto

Los que sí estarán seguro son el catalán y el rumano, que en ausencia de Sandro se ha repartido los minutos, en concreto, en los encuentros frente al Levante, el Tenerife, el Sporting, el Oviedo y el Albacete. Si uno fue titular un partido, el otro lo fue al siguiente, aunque Marc repitió ante el cuadro castellano-manchego tras salir de inicio en el Carlos Tartiere.

De alguna manera, ninguno de los dos ha ofrecido actuaciones como para dejar claro que el puesto de nueve debe ser para él, como tampoco lo había hecho Sandro antes de lesionarse. En su caso, estaba llamado a ser el líder de la delantera por su calidad –militó en el Barcelona de Guardiola y en el Everton de la Premier, por ejemplo– y su caché –la UD pagó 500.000 euros al Huesca por su cesión y desembolsará más, tal y como prometió al jugador, por quedárselo en propiedad–, sin embargo, apenas se le ha visto.

Nada más llegar se lesionó, según el entrenador, por su ímpetu por querer debutar cuanto antes. Finalmente tardó siete jornadas en hacerlo, con 13 minutos frente al Granada, y encadenó otras cinco participaciones consecutivas. La mejor de ellas, y a la vez la más ilusionante, fue la de Anduva, donde marcó su primer y único gol como amarillo con un tiro cruzado al aprovechar un gran pase en profundidad de Jonathan Viera. Parecía que una nueva sociedad había aparecido, pero por culpa de los problemas musculares del isleño no ha tenido continuidad en el curso.

El grancanario, lesionado hace un mes, trabaja con el grupo, aunque es duda para Villarreal

Ese mismo día en Miranda de Ebro Marc Cardona cayó. Era su cuarto encuentro sin marcar, pero había logrado ya cuatro tantos, uno al Málaga, dos al Andorra –uno de penalti– y uno al Alavés, y con ello cerrado el debate de si era el delantero que necesitaba la UD, toda vez que nunca se ha caracterizado por su capacidad goleadora. No está claro el asunto. Entre la cuarta jornada y la vigésima sólo vio portería una vez más, frente al Levante en el Ciudad de Valencia, donde logró un punto para la UD en el último minuto del tiempo añadido.

Así, el barcelonés, fichado a petición de García Pimienta, que lo había tenido en el Barça B, es el máximo goleador de Las Palmas, con cinco tantos, y el que más ha jugado, 16 partidos. Sandro, por su parte, sólo ha intervenido en ocho, y Andone, en nueve.

El rumano, el último en llegar, tanto que lo hizo en el día del cierre del mercado estival –tras desvincularse del Brighton– debutó la semana después de presentarse tras un largo periodo de inactividad y se rompió muscularmente ante el Leganés. Se pasó un mes fuera hasta que regresó frente al Lugo. Días después, en Ponferrada, marcó su primer gol como amarillo; el otro lo consiguió en el derbi ante el Tenerife.

Entre los tres delanteros de la UD suman tan sólo ocho de los 23 goles que lleva el equipo, es decir, un 34,8% del total. Demasiado poco. Por eso se les espera como refuerzos para la segunda vuelta.

Suscríbete para seguir leyendo