Vitolo, de pruebas para buscar el porqué de sus lesiones musculares

El grancanario, lesionado en el isquiotibial nada más entrar al campo

en el encuentro ante el Albacete, ya está recuperado, pero se le evalúa

Víctor Machín Pérez Vitolo en el instante de abandonar el terreno de juego ante el Albacete.

Víctor Machín Pérez Vitolo en el instante de abandonar el terreno de juego ante el Albacete. / ANDRES CRUZ

P. F.

Víctor Machín Vitolo está parado, por ahora. El grancanario ya está recuperado de su última lesión, una microrrotura en el isquiotibial que se produjo a los pocos minutos de entrar en el terreno de juego durante el partido frente al Albacete Balompié, sin embargo, se encuentra en un proceso de pruebas parta determinar por qué sufre tantas lesiones musculares con el objetivo de evitarlas y que pueda por fin volver a tener una vida normal como futbolistas, algo que aún no ha conseguido en esta nueva etapa en la UD Las Palmas.

Los servicios médicos de la entidad amarilla tratan de descubrir algún parámetro o cualquier indicio que pueda explicar el origen de los problemas del extremo, desquiciado por tanta lesión y, por tanto, por no poder ayudar al equipo como pretendía cuando vivió en sus carnes la eliminación en el playoff a manos del CD Tenerife y llegó cedido por el Atlético de Madrid el verano pasado hasta final de curso.

Tanto el jugador como el club entienden que si aparece algo con lo que poder evitar que Vitolo recaiga una y otra vez podrá por fin aportar lo que todos esperaban de él. El de San José tenía previsto sumarse al trabajo grupal esta semana, cuestión que sucederá en cuanto estén los resultados de las pruebas.

Cabe destacar que en casi seis meses de competición el isleño ha sufrido dos recaídas: la primera, tras la cita frente al Burgos; la segunda, durante el choque con el Alba, ambas en el Estadio de Gran Canaria. Pero antes de todo eso había tardado 11 jornadas en debutar. Cuando llegó a la UD a finales de julio todos estimaron que estaría listo para el debut liguero frente al Zaragoza, pero tardó dos meses más en estar listo.

Los números

Cuando por fin se estrenó con la camiseta amarilla por tercera vez en su carrera, jugó dos minutos ante la Ponferradina, 20 contra el Cartagena, 15 con el Huesca y 24 frente al Burgos hasta que se lesionó. A su vuelta, participó 12 minutos en Gijón, 26 en Oviedo y algo más de dos ante el Albacete. En total, suma 104 minutos en siete apariciones, con cero goles y cero asistencias. Y tres lesiones. Por eso se buscan el origen.

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