El deseo de un delantero, a la espera de una salida factible

Nadie en la UD Las Palmas se atreve a dar por cerrado el mercado de invierno, que de momento ha dejado el fichaje de Wilfrid Kaptoum, la salida de Joel del Pino y el alta de Kirian Rodríguez como únicos movimientos de la entidad amarilla, que si bien es feliz con lo que tiene, lo estaría más si suma un delantero a la plantilla en el objetivo del ascenso directo. Sin embargo, para que eso ocurra tendría que dar de baja a algún jugador, toda vez que las 25 fichas profesionales las tiene ocupadas, y no es una cuestión sencilla. Es, de alguna manera, la premisa para redondear el plantel.

El último jugador en coger fuerza en la lista de la dirección deportiva es Loren Morón, atacante de 29 años que milita en el Real Betis Balompié, con el que el la UD tiene una magnífica relación. El atacante, que jugó cedido en el RCD Espanyol la pasada temporada, sólo ha participado en dos partidos de Liga, uno de Copa del Rey y uno de Supercopa en los que va de temporada y busca una salida antes del próximo 31 de enero para poder disfrutar de más minutos.

Varios clubes de Segunda División han puesto ya su interés en hacerse con la cesión del futbolista, que prefiere militar en un equipo con aspiraciones de ascender. Es ahí donde entra la UD, que cuenta con Marc Cardona, Sandro Ramírez y Florin Andone como delanteros, pero tiene la intención de reforzar la parte de arriba siempre que pueda liberar una ficha.

La relación de la entidad amarilla con la verdiblanca y con el agente, el mismo de Kaptoum, buena

Si la relación de la entidad amarilla con el Betis es buena, también lo es la que tiene con la agencia de representación de Loren, You First, que también tiene en su nómina a dos miembros de la plantilla actual, Álvaro Valles y Kaptoum. Sin ir más lejos, ambas partes trabajaron el pasado verano para la renovación del portero y hace unas semanas para la incorporación del centrocampista.

Al delantero le interesaría una propuesta como la de Las Palmas, sin embargo, primero debe cumplirse la premisa. En ese sentido, el club busca la posibilidad de una salida factible en lo que queda de mercado, algo que no parece fácil fundamentalmente porque nadie se quiere ir. Es lógico: el equipo va como un tiro, ha estado 19 de las 24 jornadas en puesto de ascenso directo y la prima por subir es jugosa. En momentos en los que todo va bien, todos quieren estar.

Caso distinto era el de Joel, a quien el club incluyó a última hora del mercado estival sin explicar bien por qué lo había hecho. Sus números no engañan: se marchó cedido a la Balompédica Linense después de ni siquiera haber jugado un sólo minuto en Liga. Sí participó en los dos choques de Copa, pero no destacó sobremanera.

Dos casos

Los demás, en cambio, han tenido mayor o menor participación, salvo un par de jugadores que, sobre todo por las lesiones, no han tenido la oportunidad de rendir como querían y aportar al equipo: Florin Andone y, sobre todo, Vitolo.

El rumano, fichado el último día del mercado de verano por Deivid, que había sido compañero suyo en el Córdoba CF, sólo ha actuado en la mitad de los partidos, cuatro veces como titular (355 minutos). Suma dos goles, el de la victoria frente a la Ponferradina (0-1) y el tercero ante el Tenerife (3-1), nada más. El club lo tenía entre sus elegidos para hacer hueco, sin embargo, el delantero tiene claro que no quiere abandonar la Isla ahora –firmó por una sola campaña–.

El caso de Vitolo es aún más llamativo porque sólo ha jugado 104 minutos repartidos en siete ratos. Su aportación, por tanto, ha sido nula, y lo peor de todo es que nadie sabe cuándo podrá volver a entrenar. La última vez que apareció sobre el terreno de juego fue el día es que se lesionó a los dos minutos de haber entrado, frente al Albacete. Sufrió una rotura muscular de la que ya lleva tiempo recuperado, sin embargo, aún se realiza pruebas para tratar de descubrir el origen de sus continuas afecciones.

Nadie de la plantilla quiere salir, como sucediera el año pasado con Maikel y Veiga, dos descartes

En su caso, está cedido por el Atlético de Madrid hasta final de curso, por lo que romper ese acuerdo no es una cuestión sencilla. Así, dejar un hueco para realizar una última incorporación es el quebradero de cabeza en las oficinas de la UD, donde el año pasado tuvieron que aceptar que Maikel Mesa y Unai Veiga, dos de los elegidos entonces para salir y dejar hueco, no quisieran marcharse.

La otra posibilidad de que quedar una ficha libre sería una venta, algo que el club tampoco tiene previsto en este momento, toda vez que no la hizo en verano para no debilitar la plantilla y ahora considera ilógico hacer salvo que reciba una oferta irrechazable que en ningún caso espera.

Así, la llegada de un delantero está a la espera de una salida factible. En la recámara aguardan Jaime Mata, también excompañero de Deivid, en este caso en el Valladolid, y Loren Morón. El interés por el jugador del Getafe no es nuevo, tanto que en agosto estuvo cerca de firmar como amarillo, pero ahora toma fuerza el delantero del Betis, autor de un gol en la semifinal de la pasada Supercopa de España contra el Barça y que no cuenta para Manuel Pellegrini. Quiere estar en un equipo puntero, su agente es amigo del club y el club del Betis, pero debe salir uno.

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