El RC Celta de Vigo no es un buen cliente, al menos sobre el papel, para poner a prueba la capacidad ofensiva de la UD Las Palmas, reducida en este tramo inicial de la temporada a tan sólo dos goles en siete partidos, números pírricos en un equipo que tiene la salvación por objetivo. Todos en la entidad amarilla están convencido de que los tantos llegarán; un acto de fe a tenor de lo visto en el primer mes y medio de competición, en la que el cuadro amarillo, salvo en determinados momentos de algún partido, apenas ha generado ocasiones claras por mucho que su entrenador, Xavi García Pimienta, se empeñe en blanquear el problema que tiene. El próximo rival, además, juega con un sistema de cinco defensas, algo que al conjunto isleño no se le da bien.
Lo demostró, por ejemplo, en la jornada inaugural frente al RCD Mallorca en Siete Palmas, donde la UD apenas fue capaz de generar peligro en la portería de Rajkovic. De hecho, la mejor oportunidad que tuvo fue el penalti que Jonathan Viera transformó en gol, el único hasta que Kirian puso el balón en la escuadra de André Ferreira en el sexta fecha, hace justo una semana. Pero la campaña pasada también se mostró estéril ante rivales con tres centrales y dos carrileros, por lo que el choque de mañana supone un examen a la capacidad del entrenador para resolver el entuerto ofensivo.
Su primera receta, lógica por otra parte, es aumentar la velocidad de circulación de la pelota, clave para descolocar a un grupo que, previsiblemente, estará bien ordenado, como suelen ser en general los equipos de Rafa Benítez, sin embargo, es algo de lo que la UD ha carecido en los partidos que ha disputado hasta ahora.
Salvo en el encuentro frente a la Real Sociedad en la tercera fecha, cuando Las Palmas se mostró más vertical que nunca en la primera parte, si bien el esfuerzo lo acuso luego en la segunda, en el resto de partidos, salvo en ciertos momentos de la cita del Sánchez-Pizjuán, el ritmo ha sido demasiado lento, cansino, previsible para las defensas rivales.
Lejos de Balaídos, el Celta empató en San Sebastián, ganó en Almería y cayó en Barcelona
La última demostración fue en el Bernabéu, donde la UD, plagada de suplentes por las rotaciones de García Pimienta, apenas compitió. Cuando tuvo el balón, fue para descansar más que para atacar, algo que, frente al Celta, debe ser todo lo contrario si quiere estar cerca de ganar el duelo.
Por eso es previsible que el técnico catalán busque algo más de velocidad en las bandas con Pejiño o Marvin como extremo derecho. También ha probado con Sory Kaba, suplente ante el Granada, como titular en busca del primer gol del guineano, que sigue sin ver portería. Pero donde tendrá que ser diferente el equipo es en el centro del campo, en el que estarán Perrone, Loiodice Kirian y Jonathan Viera, los encargados de dar ritmo al juego, algo que no siempre hacen.
Acierto
A partir de ahí, el resto está en acertar ante Iván Villar. Cabe destacar que el Celta es un equipo que se desenvuelve bien lejos de Balaídos. La de mañana será su cuarta salida; en la tres anteriores, empató frente a la Real Sociedad (1-1), ganó en Almería (2-3) y perdió en el Olímpico de Montjuic, si bien ene se partido ganaba por 0-2 en el 81’ y luego se derrumbó: Lewandowski, por partida doble, y Cancelo, remontaron en apenas ocho minutos.
El juego del FC Barcelona, precisamente, vino bien al cuadro de Rafa Benítez, que se dedicó a esperar, para robar y salir rápido a la contra. El cuadro azulgrana pecó de lentitud en la circulación del balón durante la mayor parte del choque y apenas pudo inquietar la meta rival hasta el final. Eso es lo que García Pimienta no quiere para su equipo mañana, porque tal circunstancia facilitaría las cosas al Celta, que vive bien sin el balón. La velocidad, por tanto, es el arma para abrir el cerrojo.
Última sesión, con cuatro bajas
La UD Las Palmas llevará a cabo esta mañana su último entrenamiento antes de recibir mañana (20.00 horas, Gol) al RC Celta de Vigo en el Estadio de Gran Canaria en el partido que cierra la octava jornada de LaLiga EA Sports. Para el compromiso ante el cuadro vigués Xavi García Pimienta recupera a Mika Mármol, que no pudo jugar el miércoles pasado en el Santiago Bernabéu por haber sido expulsado días antes frente al Granada CF por doble amarilla. En principio, tanto el catalán como Álex Suárez regresarán a la titularidad tras descansar frente al Real Madrid. Quienes no estarán, en cambio, son los mismos lesionados que la semana pasada, además de Mfulu, que sufrió una rotura muscular en el templo blanco. Además del mediocentro, siguen en la enfermería Moleiro, Sandro y Benito. | P. F.