Ayoze Pérez se reencuentra con la Unión Deportiva diez años después de su único partido frente al conjunto insular. Lo hizo con la camiseta del Tenerife en un partido que acabó 3-0 en el Heliodoro y en el que el ahora delantero del Betis anotó los dos tantos finales. Una década después, con ocho años de experiencia por Inglaterra y 89 goles a su espalda, amenaza a la zaga de la UD, la segunda menos batida de Primera.
Diez años después la sombra de Ayoze Pérez se cruza en el camino de la Unión Deportiva. La noche del 4 de diciembre de 2013, a los cerca de mil aficionados de Las Palmas que cruzaron a la isla vecina la esperanza les duró 22 minutos, lo que tardó en adentrarse Suso en el área amarilla y que Barbosa le derribara. Penalti que transformó Ricardo León y el resto del partido fue un monólogo chicharrero en el que un jovencísimo Ayoze desquició a un equipo dirigido por Lobera con otros dos tantos, esta vez a Raúl Lizoain.
Ahora, con la camiseta del Real Betis, el delantero criado en la cantera del CD San Andrés, será el domingo en el Benito Villamarín (20.00 horas) una de las grandez amenazas ante el entramado defensivo de García Pimienta. Los Álex Suárez, Coco y Mika Mármol se las tendrán que ver con uno de los estiletes de la plantilla que dirige Manuel Pellegrini.
En el sistema 4-2-3-1 que prefiere emplear el Ingeniero chileno, Ayoze suele ocupar la posición de extremo izquierdo y alterna con zonas más centradas, tanto desde la segunda punta como referencia de nueve cuando ni Willian José ni Borja Iglesias están en el terreno de juego.
El del domingo puede convertirse en un partido de transiciones abiertas en las que Pimienta espera que Ayoze no emule al canterano del Tenerife de hace una década atrás que mató a las contras a la Unión Deportiva junto a Suso.
La crónica del partido de aquella noche infausta en el Heliodoro reflejó que «la UD Las Palmas con más quilates de la última década hizo el ridículo en el campo de su eterno rival justo en el curso que se preveía con más diferencias entre ambos», como reflejó José Mendoza en su crónica.
Y continuó el relato con: «A la quinta fue la vencida. Ayoze, una de las sensaciones de la categoría, encaró por enésima vez a Raúl y acertó de remate cruzado. Diez minutos más tarde no necesitó calibrar su puntería porque Suso, que no paró de incordiar y se marchó ovacionado, se lo puso en bandeja».
Dos zarpazos que unidos al tanto inicial de Ricardo León desde el punto de penalti y llevándose el dedo a la boca para contestar a Lobera tras declarar en la previa, «si juego como el Tenerife en el Gran Canaria me pitarían», supuso el bochorno para el aficionado amarillo. El mismo que este fin de semana tiene previsto acudir en masa al Benito Villamarín y espera que Ayoze no se acuerde de aquella noche de hace diez años.
Porque en toda la década siguiente, el chicharrero emigró a Inglaterra para fichar por el Newcastle a cambio de dos millones de euros y hacer una carrera como Magpie (Urraca) en el que anotó 48 goles en 195 partidos y un ascenso tras un breve paso por la Championship.
Su cartel en el norte inglés le valió para que el Leicester se fijara en él y sacara la chequera en 2019. 33,4 millones de euros para que se convirtiera en delantero fox junto a Jamie Vardy y dejara 15 tantos y 12 asistencias en 114 partidos.
Los titubeos del Leicester y su posterior descenso de categoría llevaron a Ayoze al Betis, donde firmó libre este verano y en el que le está devolviendo la confianza a la entidad verdiblanca con cuatro tantos en este inicio liguero, además de anotar otro gol en la Europa League –lleva dos asistencias–.
El domingo, se prevé que forme en la punta con un ex amarillo, Willian José, que también le tiene cogido el gustillo: siete goles a la UD.