A Martínez se le marchita la flor y la UD Las Palmas es un flan

El efecto Martínez salta por los aires. Un punto de 18 y la condición de colista en la tabla virtual de las últimas seis jornadas. El shit 2025 de la UD Las Palmas –así bautizó Flick, técnico del próximo rival de los isleños, su particular calvario en noviembre–. Capaces de tumbar al Barça en el Lluís Companys (1-2), para sepultar 54 año de espera, en el gran campanazo del siglo, a firmar un tramo deprimente ante el RCD Mallorca. Los tres tantos del bloque bermellón, del 7’ al 35’, firmados por Muriqi (2) y Dani Rodríguez, evoca a las catacumbas de este milenio. Son Moix fue un funeral. Una oda al despropósito. Tras el cero de nueve de Carrión, que forzó su despido con tres puntos en el zurrón, llegó el terremoto Martínez con el seis de nueve (19 puntos de 27). Y ahora otro serial de terror con un cero de seis. Un punto de 18 en una dinámica incendiaria que evoca a Ayestarán (un punto de 21 en la 2017 con despido), Paco Jémez (once unidades de 42 y descenso 2018) o García Pimienta(5 puntos de 42 en 2024).

Lo peor para los amarillos de Martínez es que viene el poderoso Barça de Flick de los 1,02 mil millones de valoración –según la Biblia del balón transfermarkt.es–. Un plantel de Armani que quiere seguir abonado a la excelencia en este tramo determinante del campeonato. El sábado, desde las 20.00 horas en el Gran Canaria, el más difícil todavía (Movistar Plus).

El ogro culé, el colista Valladolid en Zorrilla (viernes 28 de febrero), Betis en el Benito Villamarín (9 de marzo) y Deportivo Alavés en Siete Palmas (16 de marzo). La hora de la verdad y con la vista puesta en la recuperación exprés de efectivos. El cruce ante los pucelanos es la ocasión idónea para el despegue. Lo del Barça de Pedri es una prueba de honor, con el esmero de vigilar los goles en contra, pero lo de Valladolid es el partido más importante de la temporada. Un tropiezo de Martínez le deja sin coartada (cero victorias de ocho), con guarismos próximos a Carrión (destituido al encadenar nueve fechas sin una victoria en el peor inicio en las 36 temporadas en Primera del club pío pío). En la 17ª plaza y fuera del descenso, los legionarios de Martínez deben sumar 17 puntos en 14 jornadas. Faltan cinco triunfos y llegan los duelos directos ante los violetas, Deportivo Alavés, Getafe, Valencia, CD Leganés y Espanyol, cosas del destino, en la última jornada.

Agujero negro

La última portería a cero de la UD se remonta al 22 de diciembre ante el Espanyol en el Gran Canaria (1-0). También fue la última victoria.Han pasado 58 días. Un mundo. En la secuencia de los últimos seis partidos, los amarillos encajaron 14 tantos, lo que deja una media terrorífica de 2,33. Si lo ampliamos a toda la temporada, es de 41 dianas en 24 contiendas, lo que arroja el guarismo de 1,7 por pulso.

En todo el ciclo de Martínez, en sus quince jornadas de LaLiga, recibió 24 tantos e hizo 20. Deja una media de 1,6 goles en contra. Pero conquistó seis victorias, las únicas que figuran en la tabla. Dos victorias y siete batacazos completan el expediente del estratega milagro. El de la flor, que abrió la puerta de paraíso en noviembre y diciembre. Pero con el parón navideño, todo cambió. La UD es un sello vulnerable y el técnico vigués se muestra esquivo en sala de prensa. Cero autocrítica y algo quisquilloso ante las preguntas de los medios. Retirar a Enzo antes del descanso en Son Moix genera otro punto de conflicto con la caseta. Situaciones que debe saber llevar. Su experiencia (118 duelos dirigidos en la máxima categoría) es el aval perfecto.

El Valladolid destituyó ayer a Cocca y vuelve Álvaro Rubio –el del Promesas ya dirigió a los violetas en el Gran Canaria y ante el Valencia–. El modo pánico se apodera de la parte más deshonrosa de la tabla. La UD no puede relajarse e inicia su serial de la adrenalina en Zorilla. Tropezar abre la puerta a una decisión dramática. Un equipo ciclotímico, capaz de batir al Barça en su guarida a firmar 25 minutos terroríficos en Son Moix. Se alza el telón del drama. Primero, Yamal y Pedri, luego la hora de la verdad ante el último de la fila. Operación resurrección en un año negro.

Suscríbete para seguir leyendo