Los propietarios de este piso decidieron renovar su imagen. Especialmente sabiendo aprovechar la agradable claridad natural que posee con una certera combinación de muebles –algunos recuperados–, texturas y colores.

Fueron las bases para idear una vivienda familiar actual, acogedora y luminosa, un resultado que se consiguió tras un cambio proyectado por Ábaco Interiorismo de Pontevedra.

El equipo de Víctor Manuel Filgueira contempló la casa como un todo en el que los ambientes fluyen en armonía al conseguir espacios más amplios eliminando tabiques y apostando por el blanco para incrementar la luminosidad.

La reforma tiene otro valor añadido y es el aprovechamiento de muebles familiares y otros en stock de la propia tienda para conseguir un resultado rápido, práctico, agradable y de presupuesto ajustado. Tenía que ser una casa acogedora, con detalles muy personales y con mobiliario que luce diferente de cómo era.

Una de las ideas de partida era restaurar y combinar objetos clásicos con detalles de hoy para aportar estilo y mantener la personalidad de la vivienda.

El salón combina colores y texturas como el blanco con el grafito como nota de contraste, y la madera y la piel con las transparencias de la zona del comedor.

El dormitorio principal es ahora una auténtica suite con vestidor-despacho y un baño completo donde los tonos malva, gris perla y grafito crean un ambiente de relax.

La reorganización ha dado paso a una original distribución que contempla un pequeño vestíbulo de acceso al vestidor. En la cocina, la zona más oscura de la casa, se cambiaron los muebles por diseños más actuales y tonos claros, y se pintaron los azulejos de blanco.