En 2008 se puso a la venta la mansión donde Michael Jackson pasó sus últimos días por casi 30 millones de euros. Cuatro años después, la mansión de estilo francés se ha vendido por prácticamente la mitad. Según el periódico 'Los Angeles Times', el comprador ha sido Hubert Guez, director ejecutivo de la firma de ropa Ed Hardy.

La mansión, de 1.600 metros cuadrados, cuenta con 13 cuartos de baño, cine, ascensor, gimnasio, piscina, bodega y una impresionante casa de invitados. La casa se erige sobre un terreno de 4.800 metros cuadrados con un amplio jardín.

El rey del pop pasó seis meses en esta mansión mientras ensayaba para su concierto 'This is it' en el centro Staples de Los Angeles. Estuvo viviendo allí junto con sus tres hijos: Prince Michael de 15 años; Paris, de 14 y Blanket, de 10.

Sin embargo, el 25 de junio de 2009, Michael falleció por un sobredosis de la medicación que tomaba. Su médico, Conrad Murray, fue declarado culpable de homicidio involuntario y condenado a cuatro años de prisión.

Parece que al empresario Steven Mayer le han importado más las impresionantes instalaciones que el pasado turbio de la casa.