Las ganas de María José Campanario por estudiar son admirables. La mujer de Jesulín de Ubrique comenzaba la carrera de odontología en la universidad europea de Madrid un septiembre del 2010.

Sus comienzos en el centro no fueron nada fáciles. Despertando el interés mediático, pronto saltaban las críticas de "sus colegas" que estudiaban en otros centros, ya que las clases de la Campanario eran de fin de semana lo que suponía bastante menos horas a las que ellos hacían. No obstante, esta titulación estaba al alcance de todos los que se iniciaban y era algo que venía desarrollándose desde antes que la Campa comenzara a estudiar. Sus sueños se vieron truncados, no por ellos, sino cuando fue sentenciada por lo penal a un año y once meses de cárcel. Entonces era el propio centro el que tomaba cartas en el asunto ya que según su reglamento académico, era una falta muy grave.

La mujer del diestro recibió un gran revés pero su idea de estudiar podía más. Se matriculó en Barcelona donde solo estuvo escasas semanas ya que Jesulín y sus hijos no podían estar tanto tiempo sin ella porque era de lunes a viernes. La joven dejó sus estudios por su familia y buscó otro centro en Sevilla donde solo tenía que asistir los fines de semanas como fue su idea desde el principio, con clases muy intensivas.

Terminado el curso escolar, este año se ha matriculado en Oporto (Portugal) para estudiar en la Universidad de CESPU.

Pone en venta la casa que pagó con sus exclusivas y trabajos

Ahora la mujer del torero, ha puesto en venta la casa que en su día les regaló a sus padres para poder pagar sus estudios, según informa fuentes cercanas. Una casa que compró en su día con los trabajos y exclusivas que fue realizando tal y como apunta esta fuente. Al parecer el matrimonio Janeiro dividía al 50 por ciento todas las exclusivas que han realizado y Campanario disponía de su dinero para lo creía más conveniente. Según esta fuente, una de esas cosas fue, la compra de esta casa.

Mª José compró esta casa justo al lado de la suya en el Bosque, y sus padres pasaban largas temporadas. Años después, Jesulín y Campanario vendieron la suya y también el ático que tenían en Jerez para comprarse un precioso chalet en Arcos. Coincidiendo con esto José y Remedios regresaron a Castellón por lo que tampoco la casa está muy habitada...

Campanario tiene una meta y quiere cumplirla. Terminar sus estudios de odontología.