Apostando una vez más por el rojo español, Doña Letizia ha vuelto a acertar con el estilismo. Una deslumbrante Princesa de Asturias ha acompañado a su marido, el Príncipe Felipe, durante la cena de gala celebrada en el Palacio Real con motivo de la primera visita oficial a España como pareja del Príncipe Carlos de Inglaterra y su esposa.

Así, Doña Letizia ha vuelto a demostrar que la elegancia, la belleza y la sencillez son sus señas de identidad. Para la cita, la Princesa de Asturias ha apostado por un favorecedor vestido con cuerpo de guipur y falda de bambula que dejaba sus brazos al descubierto.

La Princesa de Asturias ha combinado este modelo, que ya vistió durante la visita de la presidenta de la India a España, con un juego de discretas joyas entre las que destacó un brillante brazalete colocado en el brazo izquierdo.

Sonriente ha posado junto al Príncipe Felipe, con esmoquin negro, camisa blanca y pajarita, el Príncipe Carlos, que también ha apostado por la pajarita y el traje oscuro, aunque, eso sí, el inglés ha preferido utilizar una camisa de un tono sutilmente amarillento y un pañuelo en su solapa de color azul para conjuntarse con su acompañante.

Por su parte, la Duquesa de Cornualles, ha escogido para la ocasión un traje largo de gala en tono azul, de cortes rectos y geométricos, de cuello estilo barco, discretamente escotado y manga larga. Con la melena suelta y bien moldeada, Camilla ha optado por darle un toque en plata al conjunto, con bolso y gargantilla en este tono.

Brindis de sobremesa

Los asistentes a la cena Real han coincidido en resaltar que el Príncipe de Asturias ha realizado un discurso cargado de guiños simpáticos y cariñosos para sus invitados, lo que no ha evitado que el heredero a la corona española haya hecho un brindis sacando a relucir el siempre controvertido tema de Gibraltar.

"Hago votos para que nuestras autoridades avancen en la solución del contencioso histórico bilateral que aún sigue pendiente", ha afirmado el Príncipe Felipe que, en esta ocasión, ha abogado además por que España y Reino Unido exploren "nuevos ámbitos de colaboración en estos tiempos de crisis y desafíos.

Al margen de la alusión a Gibraltar, el Príncipe de Asturias ha destacado "la actual vitalidad" de las relaciones bilaterales entre los dos países y su "potencial de futuro".

Don Felipe ha subrayado que España y Reino Unido son "cuna de dos de las principales lenguas de comunicación internacional" y que ambas son "fruto del enorme intercambio de visitantes, profesionales, estudiantes, y turistas" así como conocidas por el deporte, especialmente por el fútbol.

En este punto, el Príncipe se ha tomado la licencia de hacer una pequeña broma y recordar que, aunque el deporte rey en nuestro país fue "inventado" en Reino Unido, recientemente -y en clara alusión a la victoria de España en el Mundial de Sudáfrica de 2010- España ha dado "alguna muestra de liderazgo internacional, aunque no sea esta cena el mejor marco para suscitar ciertas pasiones".