Una perra llamada Boncuk ha vuelto a poner de manifiesto el apego que estos animales pueden llegar a demostrar por sus dueños tras esperar al suyo en Turquía a las puertas del hospital donde ingresó durante una semana.

Su amo, Cemal Sentürk, tuvo que ser hospitalizado de urgencia, pero ella le siguió hasta el centro sanitario de la región de Trabzon en el que fue atendido. Y frente a él se plantó a esperar su salida.

Un guardia de seguridad del hospital contó en 'Hurriyet Daily News' que el animal llegaba todos los días y se quedaba hasta la noche, cuando la familia del paciente se la llevaba de vuelta a casa. Pero Boncuk volvía a aparecer cada día por la mañana. No se atrevía a entrar en el edificio, pero tampoco se marchaba. Y así durante una semana.

La perra no cejo en su espera, porque, además, Cemal le hablaba por la ventana.

Finalmente, con el alta de su dueño una semana después, la perra se reencontró con él, en el final feliz de una historia cuyas imágenes se han convertido en un fenómeno viral.