En la actualidad, en un contexto de crisis económica, en el que la demanda de empleo excede a la oferta, saber cómo enfrentarse a una entrevista de trabajo resulta de vital importancia. Si la experiencia, los estudios y la forma de hablar son, desde luego, aspectos a tener en cuenta en una entrevista, no menos relevante resulta la imagen.

Por ejemplo, la primera impresión que demos al posible contratante debe ser óptima. Una mala primera impresión resultaría fatal para nuestros intereses, reduciendo nuestras posibilidades de éxito al mínimo.

La imagen sí importa porque ofrece información sobre el tipo de personalidad o el carácter. Ir mal vestido o desaliñado a una entrevista disminuye las posibilidades de ser contratado, aunque tampoco es bueno disfrazarse de algo que realmente no se es. El secreto consiste en mostrarse tal y como somos, procurando transmitir una buena imagen personal y fiable mientras intentamos ser coherentes con nuestra personalidad.

Cabe mencionar la importancia de saber a qué tipo de puesto estamos optando, pues no es lo mismo trabajar en una sucursal de un banco, que en un hotel o en un colegio. El objetivo es obtener el empleo y para ello se antoja vital mostrar una buena imagen personal, en general, y profesional, en particular.

En ese sentido, y con motivo del Día Internacional de la mujer, la perfumería Douglas ha organizado unos cursos dirigidos exclusivamente a mujeres para enfrentarse "con la mejor cara a una entrevista de trabajo" y ha ofrecido talleres didácticos de imagen personal en todas sus perfumerías. La cadena de perfumes ha celebrado estos cursos de forma simultánea en todos los establecimientos que la marca posee en España. La "Masterclass", como denomina la propia perfumería a los talleres, han tratado los temas de "la vestimenta, comunicación verbal y no verbal, aspecto personal y maquillaje, dependiendo del sector".

La vestimenta no es lo único que importa. Llevar el pelo limpio, usar buen desodorante (a ser posible sin perfume), evitar aerosoles que dejen marcas blancas, cuidar el aliento y abstenernos de utilizar fragancias fuertes (pues pueden distraer al entrevistador y hay aromas que pueden resultar demasiado penetrantes), son algunos de los consejos que la franquicia hace a las mujeres.

En lo que respecta a la imagen facial, hay que procurar tener la mejor cara. En esa dirección, Douglas ofrece una serie de pautas a tener en cuenta en este apartado: "nunca excedernos con el maquillaje", pero tampoco acudir sin maquillar, intentar ser discreta con un "maquillaje sutil que muestre un rostro positivo" y "no llamar la atención con colores demasiado llamativos".Al igual que el cutis, el cuidado de las manos es imprescindible. "Las manos son nuestra tarjeta de visita, de hecho el primer contacto con nuestro entrevistador será saludarle dándole la mano. Por eso es tan importante tener unas uñas cuidadas, limpias e impecables".