Penélope Cruz se convirtió en la noche de ayer en la reina indiscutible de la alfombra roja de los Premios Oscar, que celebraron su edición número 94 con una nueva entrega cargada de lujo y glamour.

La actriz española se enfrentaba a una de sus noches más importantes a la par que emocionantes, puesto que la de Alcobendas pudo volver a hacer historia si hubiese ganado su segunda estatuilla gracias a su nominación como mejor actriz protagonista tras su interpretación en la última película de Pedro Almodóvar, Madres Paralelas.

Además, esta gala era doblemente especial para la intérprete de cintas como Volver o Vicky Cristina Barcelona puesto que compartía nominación con su marido, Javier Bardem, quien optaba al premio de mejor actor por Ser los Ricardo.

Sin embargo, anoche todas las miradas estaban puestas en Penélope Cruz y en el impresionante y deslumbrante vestido que lució en la alfombra roja de los codiciados premios, antes de entrar en el teatro Dolby de Los Ángeles, donde posteriormente se haría la entrega de las estatuillas doradas más famosas del mundo.

Siempre fiel a Chanel

Una vez más, nuestra actriz más internacional ha vuelto a confiar en la firma de la que es embajadora desde el año 2018, Chanel, y su opción elegida para esta convocatoria ha hecho que se coloque en la primera posición del olimpo de las mejores vestidas de ese año.

Para esta entrega, Penélope ha escogido un diseño de Alta Costura del año 2020, protagonizado por un espectacular escote halter y una hipnótica falda con volumen que acaparó la atención de todos los flashes. Además, Pé lució en el cuello del escote un precioso lazo de pedrería que puso la nota de brillo que acompañó a la elegancia del negro, color protagonista de su vestimenta de este año.

Penélope Cruz y Javier Bardem.