Cada año se diagnostican en España 3.200 nuevos casos de melanoma, un tipo de cáncer de piel que se origina en los melanocitos, las células de la piel encargadas de producir melanina. El melanoma es el undécimo tipo de cáncer por número de casos diagnosticados en mujeres y el decimoquinto en hombres. Y es el responsable del 80% de los fallecimientos por cáncer de piel.

El melanoma puede afectar a cualquier persona y en cualquier edad, si bien es más habitual en personas con piel clara y a partir de los cincuenta años. En los hombres suele localizarse en el tronco, mientras que en las mujeres aparece con mayor frecuencia en las piernas, lo que, según los expertos, corresponde a los patrones de exposición al sol según la ropa utilizada por cada sexo. La localización del melanoma en el tronco y las extremidades también es más habitual en pacientes jóvenes, mientras que en los de mayor edad el tumor suele aparecer en la cabeza y el cuello.

El principal factor de riesgo para la aparición del melanoma es la exposición inadecuada de la piel a las radiaciones ultravioletas. La exposición inadecuada a las radiaciones solares favorece la aparición de mutaciones en el ADN de los melanocitos. Estas mutaciones permiten a las células proliferar de forma incontrolada, evitar la muerte programada -apoptosis- y adquirir la capacidad de invadir otros tejidos. La principal opción de tratamiento para el melanoma es la extirpación quirúrgica del tumor. En el caso del melanoma avanzado, cuando la extirpación quirúrgica no es posible, las principales opciones de tratamiento son la quimioterapia, la radioterapia y la inmunoterapia. Si el tumor se detecta a tiempo, las tasas de supervivencia tras la extirpación son altas.

Hábitos de fotoprotección

Solo el 59% de la población toma siempre medidas para protegerse de las radiaciones solares, como evitar tomar el sol en horas centrales del día, protegerse el cuerpo y la cabeza con prendas o utilizar gafas de sol, entre otras medidas. Así mismo, es una de las comunidades que menos utiliza los fotoprotectores (56%). Sin embargo, están entre los españoles que mas conocen la radiación infrarroja A (IR-A), causante de los efectos perjudiciales del sol a largo plazo como el envejecimiento prematuro de la piel o las manchas cutaneas, ya que hasta el 61% de la población asegura conocerla.

Aunque el 84% de los españoles afirma saber que la piel .tiene memoria., la mayoría de ellos se preocupa principalmente por las quemaduras (el 71%) un efecto a corto plazo de la radiación solar.

Más de un tercio, el 38%, no sabe que es perjudicial para la salud de la piel y que incrementa los efectos nocivos de la radiación ultravioleta. .El problema de esta radiación es que pasa inadvertida., apunta la doctora Aurora Guerra Tapia, jefa de la sección de Dermatología del Hospital 12 de Octubre de Madrid y miembro del Instituto Dermae. Las personas no son conscientes de ella porque no sienten que su piel aumente de temperatura, ni ven sus efectos a primera vista, al contrario de las quemaduras que produce la radiación UV., explica esta dermatóloga. Sin embargo, matiza, la radiación IR-A penetra profundamente en la piel y provoca severos daños como el envejecimiento de la piel y la destrucción del ADN celular.