Queda fuera de toda duda que si hay un alimento que está de moda y del que todo el mundo habla (incluso llega a agotarse en los supermercados a pesar de su precio), ese es el aguacate. No es barato pero tiene múltiples propiedades que hacen que sea el ideal para adelgazar. ¿La razón? Los nutricionistas más seguidos en redes sociales lo explican: es una fruta saciante que te ayuda a restar las calorías que te sobran y que te impiden llegar a los objetivos que te has marcado dentro de la "operación bikini".

Los expertos en salud afirman que lo más importante a la hora de cenar es que lo hagas a tiempo. Es decir: no conviene cenar a última hora para que después de ingerir los últimos alimentos del día te de tiempo a dar un pequeño paseo o para hacer algún ejercicio físico moderado. ( En este enlace te contamos las razones por las que cada vez es más importante caminar ). Justo después de cenar el cuerpo está más que activo por lo que tienes que aprovecharlo y no debes, en ningún caso, tirarte en el sofá sin más. (Recuerda además que los nutricionistas llaman a huir de los viejos mitos de que la fruta engorda).

Si cenas con tiempo suficiente antes de irte a la cama (eso te ayudará además a descansar mejor), también tienes que ingerir alimentos que te sacien. En este sentido el aguacate puede ser una buena opción para evitar que consumas ultraprocesados. Pero ¿cómo comer esta fruta que están tan de moda? Puedes hacerlo por ejemplo en ensalada. La receta es muy sencilla y apenas te llevará unos minutos. Debes utilizar aguacate partido en pequeños trozos, atún (vale con el de lata del supermercado, eso sí, siempre en aceite de oliva), un poco de cebolla, sal y un chorro de aove . Con eso ya tendrás una cena preparada en apenas unos segundos.

Además conseguirás consumir una de las cinco piezas de fruta y verdura que debes ingerir cada día para el objetivo que se marcan los nutricionistas. Pero no es lo único que tienes que hacer para cenar. También tienes que combinarlo con agua para beber (recuerda que no son recomendables ni el alcohol ni los refrescos azucarados) y con postres que te permitan perder peso. Es decir: unas fresas o un plátano pero nunca postres ultraprocesados que lo único que van a hacer es que engordes de forma innecesaria y que sumes calorías que luego son más que difíciles de quemar.