De las elecciones presidenciales en Brasil a los "chalecos amarillos" en Francia, el año 2018 estuvo marcado por una influencia cada vez mayor de las "fake news", propagadas en las redes sociales, y que socavan la confianza en los medios de comunicación y las instituciones.

La desinformación prospera. Muchas imágenes, aunque reales, son presentadas como algo que no son. Por ejemplo, se denunció la violencia policial en Francia durante las protestas de los "chalecos amarillos" con una foto de un manifestante con la cara ensangrentada, pero que en realidad fue tomada hace varios años en España. Una manipulación tan simple como eficaz.

¿Podrías decir cuál de las siguientes noticias son verdaderas?

Paralelamente, está emergiendo una nueva amenaza mucho más peligrosa: las "deep fake". Estos videos modificados permiten hacer decir a una persona lo que uno quiere que digan, con sus gestos exactos y su tono de voz. Todavía son difíciles de crear pero la tecnología está progresando rápidamente.