Pagos

¿Qué pasa si le envías un Bizum a alguien que no tiene?

Este problema es algo más normal de lo que parece

Imagen de archivo

Imagen de archivo / Pixabay

¿Te lo has preguntado alguna vez? ¿Qué pasa si te equivocas en un número de teléfono y le envías un Bizum a alguien que no existe o simplemente no está registrado en este método de pago? Es una situación más normal de lo que parece.

Bizum es uno de los proveedores de servicios de pago más conocidos y utilizados hoy en España. Nació a partir de la idea de las grandes corporaciones bancarias españolas de tener un método de pago simple y rápido para pequeñas cantidades de dinero que funcionara entre todas las entidades.

Casi todos los bancos tienen incorporado sus servicios y es la sencillez de su uso lo que lo hace tan popular en el mercado. Desde pagar una cena compartida con amigos hasta devolver una pequeña cantidad de dinero prestada.

El mecanismo no puede ser más fácil de comprender. Escribes la cantidad de dinero que deseas enviar, buscas entre tus contactos al receptor o escribes su número de teléfono y envías. Es a la hora de escribir el número cuando pueden llegar las equivocaciones.

Cuando se hace un Bizum a un contacto que no está registrado en la plataforma o tiene un banco que no tiene incluido este servicio, recibe un SMS en el que se le indica que ha recibido cierta cantidad de dinero. En el mismo mensaje aparece una invitación para darse de alta en el servicio y así recibir el dinero enviado.

Pero claro, hay un plazo para tal registro. En caso de que esa persona no se registre en un plazo de dos días desde el envío del dinero, Bizum cancelará la operación, por lo que el dinero nunca llegará a ser transferido de la cuenta de la origen y volverá a la cuenta del emisor.

Hay que recordar que también se puede cancelar una operación en Bizum siempre y cuando el remitente no haya decidido habilitar en su móvil este método de pago antes de hacerlo.

Por lo tanto, podemos decir que Bizum ya tuvo en cuenta este tipo de equivocaciones en su invención. No se corre peligro alguno de que el dinero enviado termine perdiéndose por el camino, en el infinito espacio digital.