El acuerdo plantea que se tenga en cuenta la presión y la acogida de menores que ya existe en las comunidades autónomas a la hora de fijar el nuevo reparto. Lo explica el presidente canario, firmante del acuerdo, y lo hace al lado de otro presidente autonómico que lo ve con buenos ojos: el castellanomanchego Emiliano García-Page.
El PP asegura que los criterios eximen a Cataluña y al País Vasco del reparto, y les sirve, dicen, para contentar a PNV y Junts. Argumento rechazado de plano por los ministros de Pedro Sánchez.
Recuerda el Ejecutivo que, en la actualidad, solo Cataluña ya acoge a casi el 25% de estos menores.