El triunfo de La Roja se celebró anoche, se celebra hoy y nos dejará durante un tiempo una sonrisa en la cara. Justo lo que necesitábamos. Una alegría después de meses de constantes malas noticias para nuestros bolsillos. Que se lo digan si no a los vecinos de Barbate, en Cádiz, uno de los pueblos más azotados por la crisis. Hoy en las tertulias sólo se hablaba de fútbol. Nada de crisis.