Tuvo que llegar Ancelotti al Real Madrid para lograr un doblete épico que vuelve a poner entre los más grandes a los blancos. El Real Madrid conquistó por decimocuarta vez Europa y lo hizo ante un Liverpool que saltó al césped a por todas. No estaban preparados los reds para un Courtois en estado de gracia y un Vinicus que supo ser letal cuando tocaba. Un triunfo que desató la euforia de los aficionados nada más acabar el encuentro. Cibeles se vio rápidamente invadida por una marea de madridistas deseosos de celebrar un título que sabe a gloria tras un arranque de temporada repleto de dudas.