El dinero no había estado nunca tan barato. La inesperada bajada de tipos lo sitúa en el 0,05% frente al 0,15 actual. Una bajada que aspira a sacudir el letargo de la economía europea. Hasta ahora los esfuerzos del Banco Central por impulsar el crecimiento han sido infructuosos. Mario Draghi ha sido capaz de sorprender a todos con una medida excepcional. Pero no se ha quedado ahí. Se ha aprobado un programa para comprar deuda.