Caixabank planteó ayer a los representantes de la plantilla una nueva reducción de las bajas previstas en su ERE. La dirección del banco ha propuesto disminuir en otros 450 los despidos lo que, sumado a las 686 recolocaciones internas ya planteadas en las últimas semanas, reduciría las salidas de las 8.291 planteadas inicialmente a 6.950, un 16% menos. La nueva reunión se produjo coincidiendo con la huelga convocada ayer en la entidad, el primer paro total de su historia, que según los sindicatos fue seguida por el 90% de la plantilla y obligó al cierre del 70% de las oficinas.