Los bolsillos de los españoles están un poco más llenos. El precio del litro de gasolina baja hasta 1,73 euros y el del diésel lo hace a 1,82. Los precios de los combustibles están por debajo de como estaban hace ocho meses, cuando el Gobierno comenzó a bonificar el litro de carburante con 20 céntimos. Aunque también hay quien cree que, ante la caída de precios, ya no es necesario que el Gobierno continúe con la subvención.