El pasado jueves, 16 de enero, y en el fondo del barranco de Teror, a la altura de Miraflor, medio centenar de alumnos y profesores de tres institutos limpiaron el cauce y cortan troncos de eucalipto rojo para convertirlos allí mismo en tablones de madera. Alguien dice que parece la fuga de San Diego, pero en plan forestal.

Son estudiantes de Gestión Forestal y del Medio Natural de los centros de Formación Profesional Felo Monzón y San Mateo, y de Carpintería en el Instituto Fernando Sagaseta, que realizan una clase práctica para conocer las técnicas de corte y aserrado de manos de sus profesores. A un kilómetro de distancia se desarrolla otra fase del Proyecto Eucalipto Rojo, la de trepa y poda, impulsada por el Servicio de Medio Ambiente del Cabildo.