Las tropas leales al líder libio Muamar Gadafi lanzaron este sábado un asalto contra la ciudad de Misrata, para tratar de recapturar la última localidad del oeste del país que todavía está en manos de los rebeldes. Gadafi fue lento en responder en un principio, pero ha recuperado la iniciativa y ordenó a sus tropas que realizaran una contraofensiva, aplastando una revuelta al oeste de Trípoli y haciendo retroceder a los rebeldes en el este. Misrata es el único fortín rebelde entre la capital y el frente del este alrededor de la ciudad petrolera de Ras Lanuf.
Por otro lado, la Liga Árabe pidió el sábado al Consejo de Seguridad de la ONU que imponga una zona de exclusión aérea sobre Libia, informó la televisión estatal egipcia. Una decisión que daría luz verde a la aprobación regional que la OTAN dice que se necesita para una posible acción militar. La televisión estatal dijo también que la Liga Árabe había decidido abrir canales de comunicación con el consejo libio
