La ministra de Interior austríaca, Johanna Mikl-Leitner, ha visitado este jueves la localidad fronteriza con Eslovenia nde Spielfeld donde se hayan hacinados millares de refugiados que han entrado por este paso. Mikl-Leitner ha señalado que la policía austríaca se encuentra al límite y ha anunciado que el Gobierno de Viena se plantea emular a Hungría y cerrar su perímetro fronterizo con la vecina Eslovenia con una valla. El objetivo de las autoridades austríacas es frenar el flujo de migrantes desde la localidad eslovena de Maribor, el paso más frecuentado. Se trataría de un 'muro técnico' que se sumará a la valla levantada entre Hungría y Serbia y a la otra prevista entre el país magiar y Croacia.