La familia de Alberto Pardo Touceda, dado por muerto por las autoridades españolas en los atentados de París, ha anunciado esta tarde con gran felicidad que está vivo en su casa de Estrasburgo. Alberto, de 33 años, ni siquiera se encontraba en París. La confusión, que la familia relacionada con el robo de su carnet de identidad hace tres años, ha llegado a tal punto, que el padre de Alberto recibió la llamada de la vicepresidenta del Gobierno y el propio consulado confirmó su fallecimiento a una prima. Sus padres dudaban de que se hubiera identificado tan rápido sus restos sin haberle practicado una prueba de ADN. Horas después, descubrieron que Alberto estaba escribiendo en su Facebook desmintiendo su muerte.