El primer ministro húngaro, Viktor Orban, ha perdido el referéndum sobre el reasentamiento de refugiados celebrado este domingo en el país, al no haberse superado el 50% de participación que exige la ley electoral. Tras depositar su voto en la urna, Orban ha tratado de justificarse asegurando que la victoria del referéndum no dependía del requisito legal de participación sino del sentido del voto, dando sólo validez a la mayoría de "noes" a la exigencias de Bruselas obtenida en las urnas. El populista Orban ha advertido que "las consecuencias jurídicas entrarán en vigor en todo caso", sin aclarar a la comunidad internacional qué legalidad puede dar a una consulta legalmente inválida.