Ha sido una frenética noche electoral en Estados Unidos donde, contra todo pronóstico, ha saltado la sorpresa. Donald Trump se ha convertido en el nuevo presidente de los Estados Unidos de América. Las encuestas vaticinaban, con un margen muy ajustado, que sería Hillary Clinton, la candidata demócrata, la que iba a convertirse en la primera mujer presidenta de los Estados Unidos. Pero al final ha chocado con el muro del republicano Trump. De hecho ha preferido guardar silencio y no dirigirse a sus fieles tras la derrota. Sobre las 3 de la madrugada, hora peninsular española, Donald Trump comenzaba a imponerse en varios estados clave. Se ha hecho con la victoria en Carolina del Norte. También en Ohio, donde, desde 1960, quien gana también gana las elecciones. O la disputada Florida. Era una de las joyas más preciadas para ganar la Casa Blanca, sobre todo por los 29 votos electorales que aporta. Se los ha llevado, finalmente, Donald Trump, por un puñado de votos. Clinton publicaba a esa hora un mensaje en su perfil de Twitter agradeciendo el esfuerzo a todo su equipo. Un mensaje que anunciaba el peor de los escenarios para los demócratas.