El Senado brasileño acusa al presidente Bolsonaro de varios delitos en la gestión de la pandemia. Entre otras cosas, lo acusan de retrasar la compra de medicamentos o de vacunas y minimizar la gravedad del virus. Bolsonaro niega los hechos y asegura que se trata de inculpaciones políticas. Se le imputan 9 delitos graves en un país donde la pandemia ha causado 600.000 muertes. Esos 9 crímenes representarían más de 100 años de prisión.