El pasado 6 de enero, Patricia recibió el peor regalo de Reyes. Con 66 años, tuvo que ingresar en la UCI del Hospital Molina Orosa, con síntomas muy graves por la Covid-19. Desde entonces han pasado tres meses y medio y se ha convertido en la paciente que más tiempo ha estado ingresada en Lanzarote durante la tercera ola, pero este miércoles llegaba el verdadero regalo. "Allá vamos", se escucha decir en inglés a su marido, en el vídeo que se ha grabado con su salida de esta unidad. Ahora, esta británica continuará su recuperación en planta, pero lo peor ya ha pasado. Y su alta de la UCI ha devuelto los aplausos a los pasillos del hospital y la emoción al personal. Los que fueron frecuentes durante la primera ola, pero que ahora no se veían desde hace tiempo en un vídeo.
