Gritos, insultos, caidas, detenidos, porrazos, empujones...El fin de huelga ha sido complicado en Madrid. Muchos no querían abandonar la calle y se han visto inmersos en una trifulca de que se ha saldado con al menos 21 detenidos y una treintena de heridos, 9 de ellos, agentes de policía. Las fuerzas del orden han intentado poner freno a los actos vandálicos de un grupo de radicales, aparentemente estaban coordinados. Entre los arrestados se ha identificado a miembros del grupo ultra del Rayo Vallecano y de Izquierda Castellana, un grupúsculo que más conocido en Valladolid que en la capital. Han atacado dos sucursales bancarias, un concesionario, un restaurante de comida rápida y un supermercado. Mucho mobiliario urbano ha sido arrancado para ser pasto de las llamas.